Rescatan de una alcantarilla a una mujer que llevaba tres semanas desaparecida, luego que una conductora la oyera gritar
Los rescatistas de la ciudad estadounidense de Delray Beach, en Florida, sacaron este martes de una alcantarilla a una mujer de 43 años que había estado desaparecida durante tres semanas.
Lyndsey Kennedy fue rescatada luego que una mujer que conducía por la zona escuchara sus gritos desde la alcantarilla, de unos 2,5 metros de profundidad, y llamara a la Policía. Los rescatistas quitaron la rejilla del desagüe y usaron una escalera y un arnés para ayudarla a salir. Aunque fue vista por última vez vestida, la mujer fue encontrada desnuda, sucia y cubierta de hojas. Además, tenía las rodillas rascadas y presentaba otras heridas superficiales, recoge el periódico The Washington Post.
Kennedy señaló a la Policía que el pasado 3 de marzo estaba nadando en un canal cerca de la casa de su novio cuando vio una puerta que conducía a un túnel. La mujer sintió "curiosidad", entró por la puerta y siguió otros túneles hasta que se dio cuenta de que estaba perdida. El mismo día el novio de Kennedy denunció su desaparición. Según los reportes policiales, la mujer ya había desaparecido en circunstancias similares el año pasado, según informó el canal WPEC.
Kennedy dijo que había estado en el sistema de alcantarillado durante "quizás días, quizás semanas" y agregó que sobrevivió gracias a una botella de 'ginger ale' que había encontrado. El lugar donde la rescataron estaba a casi cinco kilómetros de donde afirmó haber ingresado al túnel y la Policía ahora está tratando de determinar si realmente pasó tres semanas en las alcantarillas.
"No creemos que se haya cometido ningún delito. Pero la pregunta más importante es, ¿es creíble su historia? ¿Estuvo ahí abajo todo el tiempo?", declaró el portavoz de la Policía de Delray Beach, Ted White, agregando que, según los funcionarios de salud, Kennedy probablemente estuvo en el sistema de alcantarillado durante dos o tres días.
Los registros policiales sugieren que Kennedy, que tras el suceso fue hospitalizada, tiene antecedentes de enfermedad mental y abuso de drogas. La Policía continúa investigando el caso.