La noche del pasado sábado, Donald Trump asistió a una boda en su propiedad Mar-a-Lago en Florida, pero cuando tomó el micrófono, pareció 'olvidarse' de los recién casados y en lugar de darles protagonismo en su discurso como invitado, prefirió hablar sobre sí mismo, centrándose en la política, según un video del evento publicado por TMZ.
En pocos minutos, el expresidente de Estados Unidos abordó la situación en la frontera con México, volvió a cuestionar las elecciones presidenciales de noviembre de 2020 y mencionó a China e Irán, criticando las políticas de Joe Biden. "¿Ya me extrañan?", preguntó a los asistentes, haciendo referencia a sus años de presidencia.
"Me llegan todos estos reportes que me hablan de la frontera, me hablan de China, me hablan de Irán. ¿Cómo nos va con Irán, cómo les sienta eso? [Los iraníes] estaban listos para cerrar un trato, habrían hecho cualquier cosa, y llega este tipo [aparentemente, Joe Biden] y levanta las sanciones y luego dice 'Ahora quisiéramos negociar'", expresó Trump durante su intervención, resumiendo su versión de la respuesta de Teherán con la frase "Nosotros no negociamos con EE.UU." y agregar que "lo mismo" sucede con China.
"La frontera está mal. Está en su peor estado jamás visto, y lo que ven ahora multiplíquenlo por 10", siguió Trump. "Lo que está pasando con los niños. Viven en la miseria, viven como nadie ha visto nunca, nunca ha habido nada parecido", añadió el invitado a la boda, con aparentes críticas de la gestión por la actual Administración sobre el flujo de migrantes centroamericanos al país y el mantenimiento de los menores no acompañados en los centros de detención fronterizos.
Sin embargo, no se olvidó del todo de los recién casados —John Arrigo y Megan Noderer— y finalizó su discurso sobre la política con felicitaciones, diciendo que es "un honor" tenerlos en Mar-a-Lago y que son "una gran y hermosa pareja".