Justin Welby, arzobispo de Canterbury, afirmó en una entrevista con el diario italiano La Repubblica que la boda legal del duque y la duquesa de Sussex tuvo lugar el sábado 19 de mayo de 2018 en la Capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.
Sus declaraciones llegan semanas después de que la pareja asegurara durante una entrevista con Oprah Winfrey que el arzobispo los había casado en una ceremonia privada, tres días antes de la boda que millones de personas presenciaron.
"Firmé [el sábado] el certificado de matrimonio, que es un documento legal, y habría cometido un delito grave si lo hubiera firmado sabiendo que era falso", señaló el arzobispo.
El 22 de marzo, un portavoz del príncipe Enrique y Meghan Markle admitió a The Daily Beast que "la pareja intercambió votos personales unos días antes de su boda oficial/legal el 19 de mayo", aclarando así que, aunque sí tuvieron una ceremonia personal en su jardín, esta no fue su boda oficial.
La entrevista con Oprah, la primera que ha concedido la pareja desde que hace un año se desvinculara de la familia real británica, fue reveladora y polémica. En particular, Meghan Markle contó que la presión que ha tenido que enfrentar le hizo pensar en el suicidio, mientras que el príncipe Enrique declaró que si él y su esposa decidieron irse del Reino Unido fue "en gran parte" por el racismo.
La duquesa de Sussex también afirmó que cuando estaba embarazada de su primogénito Archie, en la familia real hubo "preocupaciones y conversaciones sobre cuán oscura podría ser su piel cuando naciera".