La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, denunció "el aumento de la actividad de las Fuerzas Armadas de los países de la OTAN en el territorio de Ucrania y en el mar Negro en las inmediaciones de las fronteras rusas", según un comunicado publicado en el sitio web de la Cancillería.
Además, lamentó que "Kiev continúe atrayendo nuevas fuerzas y armas a la línea de contacto en Donbass y violando el alto el fuego". Últimamente, las violaciones del alto el fuego en esa región del este de Ucrania, acordado en julio del año pasado por el grupo de contacto sobre la resolución del conflicto, se volvieron sistemáticas.
La portavoz considera que "la agresiva campaña de información" lanzada contra Rusia, a la que se responsabiliza de la escalada de tensión, tiene como objetivo "desviar la atención de los preparativos militares de Kiev en Donbass, el sabotaje ucraniano de la implementación de los acuerdos de Minsk y el aumento de la actividad militar de los países de la OTAN en Ucrania".
Además, aseguró que los países de la OTAN siguen prestando "apoyo financiero y logístico a las Fuerzas Armadas ucranianas". Según Zajárova, también continúa "el suministro de armas letales y el entrenamiento del personal militar ucraniano por parte de instructores occidentales".
"En 2021, está previsto realizar siete ejercicios conjuntos en territorio ucraniano con varios países de la Alianza. Las actividades de inteligencia de Estados extranjeros en Ucrania a lo largo de las fronteras con Rusia y la línea de contacto en Donbass se han intensificado significativamente, con el uso de aviones y medios radioelectrónicos", dijo Zajárova.
Desde la Cancillería rusa instan "a Ucrania y a los países de la OTAN a que pongan fin a la histérica campaña de propaganda rusófoba, detengan los preparativos militares y la escalada de tensiones en Donbass y se abstengan de acciones que puedan conducir a la desestabilización de la situación en el este de Ucrania". Zajárova insistió en solucionar el conflicto en la región "exclusivamente por medios pacíficos en base a los acuerdos de Minsk", respaldados por el Consejo de Seguridad de la ONU.
Crecientes tensiones
La situación en Donbass se ha agudizado significativamente durante los últimos meses y constituye la mayor escalada de tensiones desde julio del año pasado, cuando fue firmado un acuerdo sobre el alto el fuego en la zona.
Desde marzo del 2021 se ha divulgado una serie de videos que muestran el desplazamiento de equipo militar de Ucrania a la zona, así como material de guerra de las Fuerzas Armadas rusas a Crimea y hacia la frontera entre ambos países.
En ese contexto, el comandante de las Fuerzas Armadas ucranianas, Ruslán Jomchak, declaró a finales de marzo que Rusia está intensificando su presencia en la frontera y de esta manera crea una amenaza para la seguridad militar de Ucrania.
Desde el Kremlin afirmaron, a su vez, que trasladan sus tropas en su territorio "a su discreción" y esto "no debería preocupar a nadie", ya que "no representa ninguna amenaza". Dmitri Peskov, portavoz del presidente ruso Vladímir Putin, dijo que Rusia adopta esta medida para garantizar la seguridad de sus fronteras, ya que allí se registra "una actividad creciente de las fuerzas armadas de los países de la OTAN" y otros Estados.