El Departamento de Estado de EE.UU. advirtió a China contra lo que sus socios, Filipinas y Taiwán (considerado por Pekín como parte integral de su territorio), ven como movimientos cada vez más agresivos en la región, y mostró su preocupación por la presencia de barcos chinos en la zona del arrecife Whitsun, en el mar de la China Meridional.
"Un ataque armado contra las Fuerzas Armadas, embarcaciones o aviones de Filipinas en el Pacífico, incluido el mar de la China Meridional, activará nuestras obligaciones en virtud del Tratado de Defensa Mutua entre EE.UU. y Filipinas", advirtió este miércoles el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
A finales de marzo, Price también manifestó su apoyo a Filipinas ante la concentración de barcos chinos en el área del arrecife Whitsun, llamando a Pekín a evitar ese tipo de "actos provocadores". Además, una reciente patrulla aérea de las Fuerzas Armadas de Filipinas captó numerosos barcos chinos alrededor de las disputadas islas Spratly, ubicadas en el mar de la China Meridional. La Embajada china, a su vez, asegura que "es completamente normal" que los barcos pesqueros chinos se encuentren en el área de Whitsun.
Por su parte, el portavoz del Departamento de Defensa de Filipinas, Arsenio Andolong, indicó que su país "mantiene abiertas las opciones para gestionar la situación, incluido el aprovechamiento de las asociaciones con otras naciones como EE.UU." "Estamos en conversaciones continuas con EE.UU. sobre el tema de la defensa mutua. Ambas partes se comprometen a cumplir con sus obligaciones en virtud del Tratado de Defensa Mutua" de 1951.
Asimismo, Filipinas presentó una protesta diplomática, diciendo que el arrecife, que se encuentra 324 kilómetros al oeste de la provincia filipina de Palawan, está situado dentro de una zona reconocida internacionalmente donde tiene el derecho exclusivo de explotar la pesca y otros recursos.
El mar de la China Meridional ha sido una fuente constante de tensión durante años por ser objeto de reclamaciones territoriales y marítimas de múltiples actores: China, Vietnam, Filipinas, Taiwán, Malasia, Indonesia y Brunéi. La región, rica en recursos y una importante vía internacional por la que pasan billones de dólares en tráfico marítimo cada año, también ha sido escenario de las llamadas misiones de "libertad de navegación" organizadas por Washington.
Las tensiones también han aumentado alrededor de Taiwán. Price dijo que Washington "mantiene la capacidad de resistir" a la coerción que "ponga en peligro la seguridad o el sistema social o económico de la población de Taiwán". En respuesta, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, rechazó las acusaciones de Washington de que Pekín está participando en la "intimidación" y "coerción" en Taiwán, instando al país norteamericano a "respetar el principio de una sola China y abstenerse de acciones peligrosas" tras el paso del destructor estadounidense USS John McCain por el estrecho de Taiwán.