Un equipo de investigadores de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, en España, ha descubierto fragmentos de plástico en el interior de las medusas de la especie 'Pelagia noctiluca', un hallazgo que evidencia que este tipo de basura ya está entrando en la cadena trófica de los océanos.
Los autores del estudio incluso lograron obtener una fotografía de una medusa, en la que se puede observar un fragmento de plástico azul en la cavidad gastrovascular del animal. "La imagen constituye un hito en el estudio del impacto de la contaminación por microplásticos en esta especie, ya que por primera vez se documenta la ingestión de plástico de las medusas de este tipo en su medio natural, en el Atlántico Norte", señala la universidad.
Para el estudio, se recogieron 30 medusas en una playa de Las Palmas, y se analizaron por separado los microplásticos en su cavidad gastrovascular y los presentes en los tentáculos. En 29 ejemplares se encontró algún tipo de basura generada por el hombre. De esos desechos, la mayor parte eran fibras de algodón, pero también se encontraron fragmentos plásticos y restos de redes de pesca. Además, el 53 % de las medusas estudiadas presentaba microplásticos en su interior, confirmando que esos organismos lo habían ingerido.
Plásticos en la cadena alimentaria
Las medusas constituyen "un componente esencial" de los ecosistemas marinos, lo que puede convertirlas en un importante vector para la entrada de microplásticos a la cadena trófica marina, al ser las principales presas de muchos animales. Los resultados de esta investigación muestran que los plásticos ya se han incorporado a la cadena alimentaria y que representan un riesgo para la salud no solo de las propias medusas, sino también para los eslabones superiores como tortugas, peces, aves y mamíferos marinos, alerta la entidad educativa.
Los responsables del estudio señalan que es "urgente tomar conciencia respecto a esta problemática que causa miles de muertes de animales marinos al año, algunos de ellos en peligro de extinción". Asimismo advierten que el uso masivo de guantes y mascarillas por la pandemia de covid-19 puede haber agravado la contaminación de los océanos, porque si esos implementos no son desechados correctamente terminan llegando al mar.
"A pesar de su aparente fragilidad y su sencilla anatomía, las medusas han habitado en la Tierra por más de 500 millones de años y han sobrevivido a las grandes extinciones masivas, por lo que resulta paradójico que ahora sufran el impacto de la contaminación generada por unos recién llegados [el hombre] que llevan apenas unos 200.000 años sobre la faz de la Tierra", concluye la universidad.
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos!