Un equipo de investigadores desarrolló una mano robótica con la capacidad de obedecer órdenes del cerebro. El dispositivo funciona de manera bidireccional, ya que también puede transmitir hacia el sistema nervioso la sensación del tacto, publicó el portal arXiv, dedicado a las prepublicaciones de artículos científicos.
A cargo del proyecto, realizado para la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa de EE.UU. (DARPA), estuvo Anh Tuan Nguyen, del Departamento de Ingeniería Robótica de la Universidad de Minnesota. Según explicó, el brazo, perteneciente al proyecto Draco, "puede transmitir el sentido del tacto" gracias a la "estimulación eléctrica" presente en la interfaz nerviosa llamada 'Scorpius', "que tiene tanto receptores neuronales como estimuladores", recoge El Confidencial.
Scorpius, compuesto por microelectrodos, está conectado al sistema nervioso periférico y se encarga de enviar los impulsos eléctricos del cerebro a un procesador de inteligencia artificial, lo que finalmente permite el movimiento de cada uno de los dedos con una precisión de entre el 95 y el 99%.
Según se indicó, entre 50 y 120 milisegundos es lo que se tarda desde que el cerebro emite la orden hasta que los dedos del dispositivo reaccionan. Sin embargo, aún no tiene la misma flexibilidad que la mano humana.
La respuesta
La bidireccionalidad de este dispositivo comienza en los sensores táctiles instalados en las yemas, que envían señales a los están colocados en el brazo artificial. Entonces, a través de Scorpius se dirigen las señales nerviosas al cerebro, que las interpreta como el sentido del tacto.
Este desarrollo fue definido por Nguyen como "un camino con futuro" para hacer realidad la "simbiosis entre humano y máquina".