El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, prometió este viernes que no habrá ni encubrimiento ni impunidad para el diputado federal oficialista Benjamín Saúl Huerta, quien esta semana tuvo que renunciar a su candidatura a la reelección después de ser acusado de abuso sexual en contra de un adolescente de 15 años.
"Condeno cualquier abuso de quien sea, abuso sexual, abuso en contra de la dignidad de las personas, crímenes de odio, feminicidios, de quien sea", afirmó en conferencia de prensa.
Su posición, afirmó, se diferencia de lo que ocurría antes en el país, cuando la corrupción caminaba de mano de la impunidad. "Desde que tomé posesión dije que no iba a haber impunidad para nadie, ni para mi familia. El que comete un delito tiene que ser castigado porque no somos iguales, no vamos a encubrir, hay que sancionar castigar a los responsables de cualquier delito", dijo.
La denuncia contra el diputado
Huerta, de 63 años, fue detenido el pasado miércoles en un hotel de una céntrica colonia de la Ciudad de México, acusado de haber abusado sexualmente de un menor de 15 años, a quien habría drogado para hacerle tocamientos.
El denunciante aseguró que acudió a una cita con Huerta porque el legislador le había ofrecido trabajo, pero después del abuso logró pedir la ayuda de trabajadores del hotel, quienes llamaron a la Policía.
Sin embargo, Huerta solo permaneció detenido durante algunas horas, ya que su abogado demostró que cuenta con fueros parlamentarios gracias a su cargo como diputado federal.
Mientras la indignación crecía, el líder de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velasco, rechazó la posibilidad de desaforar a Huerta con el argumento de que los hechos que se le imputan corresponden a su vida privada, lo que es incorrecto ya que está acusado de un delito que amerita una causa penal.
"Yo no puedo expresarme por la vida personal, el respeto al derecho ajeno es la paz, no lo hizo en su función como diputado federal y repito: yo de la vida personal no puedo opinar", dijo Mier Velasco, lo que le granjeó una andanada de críticas.
El acusado, por su parte, aseguró que era inocente y confió en que el caso se aclararía. "Hoy se ha cometido una grave afectación a mi imagen y a la de mi familia, por ello exhorto a las autoridades competentes a que se hagan los deslindes de las responsabilidades que en este caso ameritan y que pronto se haga justicia", dijo.
Pero el escándalo creció a tal magnitud que finalmente tuvo que renunciar a su candidatura a la reelección como diputado por el estado de Puebla, a la que se había registrado con miras a las elecciones legislativas del próximo 6 de junio, y hoy se quedó sin el apoyo del presidente.
"Que se actúe"
López Obrador señaló que intervendrán las instancias de Morena, el partido oficialista que tendrá que analizar eventuales sanciones, pero también el Poder Judicial porque es una causa que recae en la esfera del derecho penal.
"Los afectados tienen que presentar denuncias, ya no es la Procuraduría de antes, ya no es la mafia del poder la que tiene a su cargo el gobierno, ya es otra cosa, entonces que se actúe", dijo al rechazar la intención del diputado de ampararse en sus fueros como legislador para evadir la acción de la Justicia.
"Por eso es muy importante la democracia, porque cuando es el pueblo el que elige libremente, el gobernante tiene que mandar obedeciendo al pueblo, no le puede fallar, Cuando no hay democracia, cuando son los grupos de intereses creados los que imponen a las autoridades, va a ser un pelele, un títere y va a estar al servicio de quien lo impuso", señaló.
El presidente agregó que, contrario a sus antecesores, su Gobierno no está al servicio de ninguna minoría sino del interés general de la Nación. "Se presentan estos casos y nuestros adversarios (analizan) pues qué pueden sacar de raja (aprovechar), si nosotros lo que queremos es que se castigue a quien comete un delito y no establecemos relaciones de complicidad con nadie", afirmó.