El presidente de Colombia, Iván Duque, hará varias modificaciones a su proyecto de reforma tributaria tras la huelga que este miércoles paralizó al país, anunció oficialmente.
Según detalló este viernes el mandatario, ordenó al Ministerio de Hacienda que "construya un nuevo texto con el Congreso que recoja el consenso y que permita nutrirse de propuestas valiosas que han presentado los partidos, las organizaciones de la sociedad civil y el sector privado".
Entre los cambios que tendrá el nuevo proyecto, "no va a haber aumentos en el IVA, en bienes o servicios, y tampoco cambiarán las reglas de juego actuales", señaló Duque.
También retrocedió con uno de los puntos más cuestionados, el impuesto a la renta. Según explicó el mandatario, las personas que hoy no lo pagan no lo harán a partir de esta reforma. "Es decir, no se va ampliar la base del impuesto de renta", dijo.
Y añadió: "Hemos escuchado a los colombianos".
El anuncio del gobierno se da horas después de que miles de personas salieran durante dos días a las calles a protestar por una medida que consideran perjudicial para las clases medias y populares, ya golpeadas por la crisis que provoca el coronavirus.
El paro fue convocado por 43 organizaciones sindicales, políticas, indígenas, campesinas y sociales que demandaron la anulación del proyecto.
En el marco de las protestas, se registraron dos personas fallecidas y una treintena de detenidos, en medio de incidentes y represión en varias ciudades del país, principalmente en Cali y la capital Bogotá.
Pese a las restricciones por la pandemia del covid-19 y los insistentes llamados de las autoridades para detener la movilización de ciudadanos, las manifestaciones fueron masivas en los principales distritos colombianos.
Polémica iniciativa
Originalmente, la iniciativa que promovió el jefe del Ejecutivo al Congreso, llamada Ley de Solidaridad Sostenible, contemplaba aumentar el IVA en productos y servicios, así como ampliar el padrón de contribuyentes. Con este proyecto, el Gobierno colombiano buscaría recaudar 6.800 millones de dólares que supuestamente serán destinados a paliar los efectos de la crisis económica provocada por la pandemia del covid-19.
En concreto, la propuesta oficial contemplaba fijar el IVA del 19 % para los servicios públicos de energía, alcantarillado y gas domiciliario, eliminar la exención de este impuesto en alimentos básicos y reducir el monto mínimo a partir del cual los ciudadanos deben pagar impuestos.