Dos mujeres asiáticas fueron atacadas por una desconocida que, armada con un martillo, les exigió que se quitaran las mascarillas. El incidente ocurrió la noche del pasado domingo en Times Square, en la ciudad de Nueva York (EE.UU.), cuando las víctimas se dirigían hacia el metro, informa NBC News.
En imágenes captadas por las cámaras de seguridad y difundidas este martes por el Departamento de Policía de Nueva York, se puede ver cómo una mujer negra se acerca a ambas, se abalanza sobre ellas y empieza a golpearlas con un martillo.
Según las autoridades locales, una de las mujeres, de 31 años e identificada como Theresa, sufrió una laceración en la cabeza y fue trasladada de urgencia a un hospital. La otra víctima, de 29 años, no parece haber sufrido lesiones físicas. En cuanto a la atacante, que escapó del lugar de los hechos, está siendo buscada por la Policía, que investiga el incidente como un posible delito de odio.
La víctima detalló a ABC7 que la agresora "estaba hablando sola, como si le hablara a una pared", por lo que pensó que "tal vez estaba borracha o algo así". "Así que solo queríamos pasar delante de ella rápidamente. Cuando lo hicimos, nos vio y nos dijo 'Quítense la mascarilla de mierda', lo que fue chocante", explicó. "De repente sentí que algo me golpeaba en la cabeza", agregó.
"Nunca me he enfrentado a este tipo de cosas. Esto no había ocurrido jamás en mi vida", dijo a NBC New York.
Por su parte, el alcalde Bill de Blasio pidió a los neoyorquinos que se solidaricen con los estadounidenses de origen asiático. "Si alguien comete un acto de violencia o prejuicio contra los neoyorquinos de origen asiático, sufrirá las consecuencias", subrayó. "Y eso es lo que hacemos cada día, asegurarnos de que ninguna ofensa quede sin el seguimiento y las consecuencias adecuadas", añadió.
Mientras, el gobernador del estado, Andrew Cuomo, ordenó al Grupo de Trabajo de Crímenes de Odio que ofrezca ayuda en la investigación. Apuntó en un comunicado que estaba "asqueado por este violento ataque", que calificó como "el último crimen de odio aparentemente sin sentido y despreciable contra los asiático-americanos en este estado".