El Banco de España pide un paquete integral de reformas y se muestra partidario de implementar la 'mochila austríaca'
El Banco de España ha avalado la gestión económica del Gobierno de España durante la crisis sanitaria de la pandemia, según se recoge en su último informe anual, publicado este jueves, en el que pide un paquete de reformas estructurales para apuntalar la recuperación de la economía. Además, señala su preocupación porque aumente la desigualdad empujada por las consecuencias de la pandemia de coronavirus.
El organismo sostiene que la respuesta de política económica fue "rápida y decidida" en la fase inicial de la pandemia, destacando la "batería de medidas dirigidas a proteger las rentas laborales, apoyar a los hogares más vulnerables y proveer de liquidez a las empresas", señalando especialmente los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) como un "mecanismo fundamental" para proteger el empleo.
Además, destaca nueve ítems como principales retos que debe afrontar el país: crecimiento potencial reducido, envejecimiento poblacional, sostenibilidad de las finanzas públicas, deficiencias en el mercado laboral, capital humano, desigualdad, digitalización, transición ecológica y desafíos del sector bancario.
Nuestra economía se enfrenta a retos estructurales (aumentar la productividad, corregir deficiencias del #mercadolaboral, reconstruir el #margenfiscal) y desafíos como el envejecimiento poblacional, la desigualdad y el #cambioclimáticohttps://t.co/1SoqseUCHU 4/5 pic.twitter.com/bV22epatPy
— Banco de España (@BancoDeEspana) May 13, 2021
Para ello apunta a "tres palancas fundamentales" para llevar a cabo una transformación estructural: la aprobación de una agenda ambiciosa de reformas, el diseño de un plan de consolidación fiscal plurianual y el Plan Nuevas Generaciones de la Unión Europea.
Mochila austríaca
El Banco de España recomienda corregir la dualidad entre trabajadores temporales e indefinidos, promover la prolongación de la vida laboral de los trabajadores de mayor edad y actuar sobre la baja tasa de fecundidad en el país. Asimismo, apuesta por valorar las prestaciones del sistema público de pensiones en aras de asegurar su sostenibilidad.
Entre sus recetas para el mercado laboral, la entidad sugiere la implantación de la denominada como 'mochila austríaca', un modelo en el que se reducen las indemnizaciones por despido y se establece un fondo de capitalización individual nutrido por las empresas con ayuda del Estado y de los fondos europeos. Así, estima su coste en alrededor de 9.000 millones de euros y propone que 8.000 millones sean asumidos por el Estado con cargo a las ayudas europeas.
En este sentido, propone que las empresas aporten a ese fondo individual seis días por año trabajado, cantidad que se descontaría de la indemnización en caso de despido; mientras que el trabajador podría hacer uso de esa cantidad en caso de despido, para formación o para la jubilación.
Además, la entidad propone otras medidas, como implementar el contrato único con despido creciente, ampliar el uso del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y actuar para aumentar la oferta de vivienda en alquiler y su asequibilidad.
En cuanto al ámbito tributario, el organismo avala las intenciones del Ejecutivo de Sánchez de corregir el déficit fiscal del país, que recauda alrededor de 7 puntos menos que la media europea, asunto en el que aboga especialmente por fomentar la fiscalidad verde.
Una de las economías más dañadas por la pandemia
El PIB español se contrajo un 10,8 % en 2020, con uno de los datos más desfavorables de las economías avanzadas. El impacto de la pandemia ha sido mayor entre las pymes y autónomos que entre las empresas grandes, y a nivel territorial las provincias insulares y las del arco mediterráneo han sido las más impactadas.
En el mercado de trabajo se han visto más afectados los asalariados con contrato temporal, los jóvenes y aquellos con rentas más bajas, mientras que el déficit de las administraciones públicas aumentó el pasado ejercicio en 8 puntos, hasta el 11 % del PIB.
Las últimas proyecciones del Banco de España, de marzo de 2021, apuntan a una recuperación relativamente robusta a partir del segundo semestre de este año, aunque el impacto sobre el empleo, el nivel del PIB y las cuentas públicas será relativamente persistente, según el organismo.