Dos bomberos del condado de Los Ángeles podrían ser despedidos y un tercero suspendido por haber tomado y compartido fotos del lugar del accidente de helicóptero en el que murieron la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, su hija Gianna y otras siete personas, informa Associated Press citando documentos judiciales.
El recurso fue presentado esta semana como parte de una demanda federal de la viuda del deportista, Vanessa Bryant, contra el condado de Los Ángeles por invasión de la privacidad. Además, esta nueva apelación propone que el juicio previsto para el 16 de noviembre se posponga cinco meses, hasta abril del 2022, debido a la gran cantidad de material que deben revisar los abogados.
Una investigación interna realizada por el Departamento de Bomberos del condado de Los Ángeles encontró que dos de sus efectivos habían fotografiado los cuerpos de las víctimas con el fin de satisfacer sus "instintos y deseos más básicos de lo que equivalía a chismes visuales", afirma el equipo legal de Vanessa Bryant.
"Daño hipotético"
Esas imágenes fueron enviadas a un tercer bombero, un oficial de relaciones públicas, quien compartió las fotos con otros compañeros que estaban fuera de servicio y sus allegados.
Los abogados del condado de Los Ángeles argumentan que no existe una base legal para la demanda de la viuda de Kobe Bryant, debido a que las fotografías no se difundieron públicamente y ella no puede demandar por un "daño hipotético".
El gobierno estatal de California firmó el año pasado una ley que tipifica como delito que los socorristas tomen fotografías no autorizadas de cadáveres en la escena de un accidente o crimen.