Desde el 14 de abril, cuando alcanzó su máximo histórico de 63.775 dólares, el bitcóin ha perdido el 36 % de su precio y se vende ahora por alrededor de 40.300 dólares, según el portal CoinMarketCap.
De este modo, la divisa regresó a niveles anteriores a la inversión multimillonaria de Tesla, que tuvo lugar el 8 de febrero. Horas después de que la compañía gastara 1.500 millones de dólares en la compra de la criptomoneda, esta subió a 43.275 dólares. Luego, el 15 de marzo, la empresa anunció que aceptaría bitcoines como medio de pago por sus vehículos, disparando aún más la divisa.
Sin embargo, el pasado miércoles el fundador de Tesla, Elon Musk, informó que se abandonaría el uso del bitcóin para las compras de automóviles. Posteriormente criticó a la criptodivisa más grande por su daño medioambiental, por el uso de combustibles fósiles para la minería y transacción de bitcoines. Además, este martes China prohibió que sus financieras operen con monedas virtuales, lo que provocó una caída de 'tokens' generalizada.
En un comentario a Bloomberg, el director ejecutivo del fondo de cobertura ARK36, Ulrik Lykke, resaltó el rol del fundador de Tesla en el tipo de cambio del bitcóin. "Siendo realistas, no es la primera vez que los tuits de Elon Musk han sido erráticos y, francamente, incorrectos", afirmó el financiero.
"Los mercados de criptomonedas están extremadamente impulsados por las emociones y sus participantes son propensos a reaccionar de forma exagerada a los eventos que perciben como negativos", indicó Lykke.