La estrella del cine mexicana Salma Hayek confesó en una entrevista que pasó gran parte del año 2020 recuperándose de un caso "casi fatal" de covid-19 y aún no ha recobrado la energía que tenía antes del contagio. Su padecimiento fue tan severo que llegó a pensar en la muerte y dijo a su médico que "preferiría morir en casa" cuando este le suplicó ir a un hospital, recoge la revista Variety.
Hayek detalló que su batalla con el coronavirus duró cerca de siete semanas al comienzo de la pandemia, el tiempo que pasó aislada en una habitación de su mansión londinense que comparte con su marido, François-Henri Pinault, y su hija, Valentina. Durante algunos días, la actriz estuvo conectada a un tanque de oxígeno y solo en abril pasado regresó al trabajo con el rodaje de una nueva película de Ridley Scott.
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