Imputan cargos a los dos policías de EE.UU. que protagonizaron el violento arresto de una mujer de 73 años con demencia y se rieron de ella

Autoridades judiciales en Estados Unidos ha imputado cargos a dos ya expolicias involucrados en la violenta detención de una anciana con demencia el año pasado, según anunció este miércoles Gordon McLaughlin, fiscal del Octavo Distrito Judicial de Colorado.

El entonces oficial del Departamento de Policía de Loveland Austin Hopp fue acusado de asalto en segundo grado, intento de influir en un funcionario público y mala conducta oficial. Sobre su compañera en la escena, Daria Jalali, pesan cargos por no haber intervenido para evitar el uso excesivo de fuerza, no haber informado del mismo y también por mala conducta. 

Karen Garner, de 73 años, fue detenida el 26 de junio de 2020 acusada de robar artículos por un valor de 13,88 dólares en un supermercado de Walmart. Cuando caminaba hacia su casa, Hopp le pidió que parara y hablara con él, pero ante su negativa la agarró, la puso contra el suelo y la esposó. Las imágenes de su cámara corporal provocaron indignación cuando se publicaron a principios de abril.

ADVERTENCIA: LAS SIGUIENTES IMÁGENES PUEDEN HERIR SU SENSIBILIDAD

A consecuencia de los hechos, la septuagenaria terminó con un hombro dislocado, un brazo fracturado y un esguince de muñeca. Según su abogada, sufre de demencia y afasia sensorial, lo que afecta su capacidad para comunicarse verbalmente con las personas o comprender a los demás, condición por la cual olvidó pagar.

A finales de abril, la abogada Sarah Schielke, representante de la familia de la víctima, publicó un video en el que se ve a Hopp, Jalali y un tercer policía (Tyler Blackett) riéndose mientras revisan las imágenes de la detención de Garner. En ese entonces, la letrada también alegó violaciones de la Ley de Estadounidenses con Discapacidades, afirmando que debido a las limitaciones mentales de Garner, ella "no podía hablar por sí misma o entender" las intenciones de Hopp, y que los oficiales "no se acomodaron razonablemente a su discapacidad".

No es suficiente

Schielke aseguró sentirse aliviada tras la presentación de los cargos penales, pero expresó preocupación por el hecho de que "no llegaran a acusar a ninguno de los sargentos supervisores involucrados". Al mismo tiempo, la familia Garner abogó por más cargos argumentando que las acusaciones no deberían "terminar donde terminan los videos" porque se trata de un caso de "fuerza excesiva" que tendría que "escalar" toda la cadena de mando.

"No podemos quedarnos sentados y dejar que vuelva a suceder sabiendo lo que sabemos", afirmó Shannon Steward, nuera de Garner.

Aunque el mes pasado el Departamento de Policía de Loveland anunció la salida de Blackett, Hopp y Jalali, sobre sus supervisores aún no hay repercusiones. Se trata de Antolina Hill y el sargento Philip Metzler, este último acusado de negar atención médica a Garner y tratar de encubrir las acciones de la oficina. Una fuente policial confirmó recientemente que Metzler está de licencia pagada a la espera del resultado de la investigación y Hill permanece en su puesto. 

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