Un traficante de drogas británico, que fue capturado gracias a una foto de un trozo de queso, fue condenado este viernes a 13 años y 6 meses de prisión, tras haberse declarado culpable de conspiración para el suministro de cocaína, heroína, éxtasis y ketamina y transferencia de bienes delictivos.
Carl Stewart, residente de la ciudad de Liverpool de 39 años, buscaba clientes a través de Internet y para estar en contacto con ellos utilizaba una 'app' con cifrado avanzado que impedía a las autoridades descubrir su identidad y localizarlo, según comunicó la Policía del condado de Merseyside.
Sin embargo, un día el hombre compartió en un chat de la plataforma una imagen que mostraba un trozo de queso en la palma de su mano, a partir de la cual las autoridades obtuvieron sus huellas dactilares.
"Carl Stewart se dedicaba a suministrar grandes cantidades de drogas de clase A y B, pero fue descubierto por su afición al queso 'Stilton', tras compartir a través de EncroChat una foto de un trozo de este en su mano. A partir de esta foto se analizaron las huellas de la palma de la mano y de los dedos y se estableció que pertenecían a Stewart", explicó el oficial Lee Wilkinson.