Al menos cuatro personas murieron este viernes en Cali, en el Valle del Cauca, Colombia, en el marco de las protestas que desde hace un mes se registran en el país contra el Gobierno de Iván Duque, informó el diario local Nuevo Siglo.
Según declaró el alcalde de la ciudad, Jorge Ospina, tres de los fallecimientos ocurrieron en un enfrentamiento armado entre personas que pretendían levantar un bloqueo de vías y quienes lo sostenían, en el sector de La Luna, municipio de Candelaria.
"La reyerta ha traído esta situación de muerte y dolor", dijo Ospina en un video publicado en las redes sociales.
Y agregó: "No debemos caer en la tentación de la violencia y la muerte. Por el contrario, justicia y diálogo son dos conceptos que deben estar operando y son complementarios".
En este caso, uno de los agresores disparó y mató a dos jóvenes manifestantes, por lo que otros varios de los que sostenían el bloqueo corrieron al atacante y lo lincharon. Se trataba de un militar integrante del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación, identificado como Fredy Bermúdez.
Asimismo, el alcalde de Candelaria, Jorge Eliécer Ramírez, confirmó la muerte de un joven de 24 años durante otro enfrentamiento por los bloqueos, reportó el diario El Tiempo.
En la tarde de esta violenta jornada, la gobernadora del Valle del Cauca, Clara Luz Roldán, decretó el toque de queda desde las 19:00 de este viernes hasta las 5:00 del sábado (hora local).
En tanto, el presidente Duque arribó por la noche a Cali, acompañado del ministro del Interior, Daniel Palacios, para reunirse con autoridades locales y otros funcionarios en pos de abordar la difícil situación.
Los hechos se producen cuando se cumple un mes del estallido social en Colombia, el mayor de su historia reciente, que ha dejado ya decenas de muertos, miles de heridos y cientos de desaparecidos.
Para este viernes, el Comité Nacional del Paro (CNP) había convocado marchas, bloqueos de rutas, actos culturales y musicales, "plantones" y cacerolazos en diversas ciudades del país.
Desde el pasado 28 de abril, cuando comenzó el conflicto político en rechazo a un proyecto oficial de reforma impositiva, se han registrado 3.155 casos de violencia policial, según reporta Temblores, una organización de derechos humanos.
En ese contexto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) solicitó la autorización de las autoridades para visitar el país, a fin de investigar las "graves violaciones" que se denuncian diariamente.
Si bien en un primer momento la idea fue rechazada por el Gobierno con el alegato de que "no era el momento", la vicepresidenta y canciller colombiana Marta Lucía Ramírez confirmó que ya no hay oposición oficial al ingreso al país de una delegación de la CIDH.