El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó este martes que, si de su gabinete de ministros y de él depende, su país albergará la Copa América.
"Si depende de mí y de todos los ministros, incluido el de Salud, ya está definido, se celebrará", comentó a sus seguidores a la salida del Palacio de la Alvorada. Bolsonaro incluso acusó al canal Globo de llevar una campaña en contra porque, según él, los derechos del partido son para el Sistema Brasileño de Televisión (SBT).
El ultraderechista realizó estas declaraciones después de la polémica surgida el lunes tras conocerse que Brasil, que se encuentra a las puertas de una tercera ola y es el segundo país en el mundo con más muertes por covid-19, albergará el evento a partir del 13 de junio.
Colombia y Argentina debían acoger el torneo, sin embargo, Bogotá desistió de la idea después de que la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) no le permitiese aplazar la fecha de inicio del campeonato por la crisis política, y Buenos Aires siguió el mismo camino debido a la situación sanitaria que atraviesa por el coronavirus.
Pocos minutos después de los comentarios de Bolsonaro, Renan Calheiros, instructor de la comisión que investiga la gestión de la pandemia por parte del Gobierno, interrumpió la sesión para abordar el asunto.
"Necesitamos disputar el campeonato de la vacunación, en el que Brasil ocupa uno de los últimos lugares. En cambio en el campeonato de la muerte somos campeones", dijo.
Tercera ola
Destacados especialistas advierten de lo peligroso que puede ser celebrar el torneo en Brasil, donde los muertos ya superan los 462.000 muertos, hay más de 16,5 millones de contagios y la ocupación hospitalaria está al límite.
También los partidos de la oposición y la opinión pública expresaron su indignación, lo que provocó que el lunes por la tarde, en un intento de calmar las aguas, el jefe de Gabinete dijese que por el momento no había confirmación oficial y que todavía se encontraban "en medio del proceso".
Luiz Eduardo Ramos explicó que el Gobierno puso varias condiciones a la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para la realización del torneo, entre ellas, que no haya público en los estadios.
La media de nuevos casos de covid-19 en Brasil estuvo cerca de 56.000 en la última semana y registra un promedio de más de 1.000 muertes diarias desde hace 130 días. También hace frente a la nueva variante de India, que se añade a las otras que circulan desde hace meses por el país. Un panorama que indica que la pandemia está muy lejos de ser controlada.
En 2019, Brasil fue la sede de la última Copa América y el año pasado fue postergada por la pandemia.