La peor de las noticias. La Delegación del Gobierno español en Canarias informó que se encontró un cuerpo sin vida, aparentemente de una menor, en la zona donde se buscaba a Anna y Olivia, de uno y seis años, desaparecidas en Tenerife.
"Por respeto a la familia y al procedimiento judicial, hay que esperar a lo que determine la autoridad judicial sobre la identificación del cuerpo", indicó.
Por su parte, la Guardia Civil subrayó que el cuerpo fue hallado por el robot del buque de búsqueda Ángeles Alvariño, del Instituto Español de Oceanografía, desplazado a Tenerife para el rastreo del fondo oceánico.
Según medios locales, que citan fuentes del caso, el cuerpo corresponde a Olivia, la niña de seis años, y fue hallado dentro de una bolsa detectada en el fondo del mar a unos 1.000 metros de profundidad y a unas tres millas de la costa.
Además, según recoge la prensa, la magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Güimar practicó el levantamiento del cadáver de una niña de unos seis años que, a falta de pruebas médico forenses más determinantes, "podría corresponder, prácticamente con toda seguridad, a Olivia Gimeno". El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) explicó que el cuerpo estaba en el interior de una bolsa de deportes amarrada a un ancla. Junto a ella, había otra bolsa de deportes vacía.
La búsqueda
El 27 de abril, Tomás Gimeno, de 37 años, recogió a sus hijas, pero nunca se las entregó a su expareja, como habían acordado.
Beatriz Zimmernann, de 35 años y madre de las niñas, puso una denuncia por desaparición tras recibir una llamada de Gimeno, advirtiendo que no les volvería a ver a ninguno de los tres. El hombre envió también varios mensajes telefónicos a otros familiares y allegados despidiéndose.
Las Fuerzas de Seguridad del Estado catalogaron el caso de alto riesgo.
La Guardia Civil centró la búsqueda en el rastreo del área marítima alrededor de la isla donde Gimeno fue visto por última vez mientras salía al mar con su pequeña embarcación, que fue hallada a la deriva con restos de sangre, pero sin indicios de las pequeñas.
El último descubrimiento esta semana fue una bombona de oxígeno de buceo atada a un edredón, que pertenecen a Gimeno, hallados por el buque oceanográfico Ángeles Alvariño en el fondo del mar.
Se baraja la posibilidad de que el hombre utilizó la bombona y la manta para lastrar bultos, por lo que la búsqueda ha estado centrada en hallar el cinturón de ocho kilos de plomo y el ancla que llevaba Gimeno en la lancha junto al tanque de oxígeno.
Los trabajos de rastreo por parte de los agentes continúan en la zona, a una milla náutica del puerto de Güimar.
"No puedo imaginar el dolor de la madre de las pequeñas Anna y Olivia, desaparecidas en Tenerife, ante la terrible noticia que acabamos de conocer. Mi abrazo, mi cariño y el de toda mi familia, que hoy se solidariza con Beatriz y sus seres queridos", ha señalado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, también ha expresado su pesar a través de las redes sociales. "No hay palabras para acompañar a Beatriz en estos momentos de terrible dolor. Esta violencia que se ejerce contra las mujeres madres para golpear donde más duele es una cuestión de Estado. Estamos aquí para lo que sea necesario. No más #ViolenciaVicaria", apuntó.