Un estudio publicado este miércoles 9 de junio en la revista Science Advances evidencia la presencia de diminutos depósitos de hierro y cobre en el cerebro de dos personas fallecidas tras sufrir de Alzheimer.
Científicos del Reino Unido, Alemania y Estados Unidos, autores de la investigación, describen su descubrimiento como sorprendente y muy importante para el estudio de esa enfermedad. El hallazgo podría ayudar a los científicos a comprender mejor cómo esos metales elementales contribuyen a las dolencias neurodegenerativas y dar pistas para un tratamiento alternativo contra ellas.
Los expertos recolectaron tejido cerebral de dos pacientes fallecidos con Alzheimer y encontraron algunas formas de elementos dañinos en la placa amiloide, un sello distintivo de la enfermedad. Así, detectaron nanopartículas de cobre y hierro que no se oxidaron, como tampoco ganaron ni perdieron electrones.
Precisaron estos especialistas que es la primera vez que tales nanopartículas aparecen en tejidos humanos de cualquier tipo, y sugirieron que los minerales encontrados podrían explicar cómo la enfermedad de Alzheimer daña las células, ya que sus superficies serían altamente reactivas.
Cobre y hierro se encuentran diseminados por todo el cuerpo de las personas sanas, incluido el cerebro. Ambos minerales pueden estar allí en diferentes estados de oxidación, dependiendo del compuesto en el que residan.
Pero si bien se sabe que las enzimas y proteínas que contienen iones de cobre o hierro cargados positivamente controlan procesos claves en el cerebro humano, se conoce poco sobre la manera en que ese órgano los mineraliza. Esto abarca la formación de nanopartículas de esos metales elementales, que son más reactivas que los óxidos de los cuales se originan.
Los investigadores reconocen que hay mucho más trabajo por hacer. Hasta el momento no se ha confirmado si esos metales aparecen en otros pacientes con Alzheimer, o si están presentes en pacientes que pueden tener otros trastornos degenerativos del cerebro.
"La inesperada identificación de cobre y hierro dentro de las placas amiloides de la enfermedad de Alzheimer sugiere que los elementos metálicos biogénicos, previamente observados sólo en microorganismos, virus y plantas, también pueden aparecer en seres humanos", señalaron los autores.