El nivel de agua del mayor embalse de EE.UU. cae a su mínimo histórico por la sequía

La Oficina de Recuperación del Departamento del Interior estima las reservas del lago Mead seguirán bajando hasta noviembre y para después volver a repuntar.

El lago Mead en el río Colorado, el mayor embalse artificial de EE.UU., situado entre Nevada y Arizona, ha alcanzado su mínimo histórico en medio de la sequía que azota el suroeste del país. De acuerdo con los datos de la Oficina de Recuperación del Departamento del Interior estadounidense, la elevación de sus aguas ha caído a los 326,6 metros, el nivel más bajo desde la construcción de la presa en la década de 1930.

La última vez se alcanzó una marca parecida fue en julio de 2016 y actualmente es 5,6 metros más baja que el año pasado. La portavoz de la Oficina de Recuperación, Patricia Aaron, comentó a AP que estiman que el nivel de agua en el lago Mead seguirá bajando hasta noviembre y después empezará a repuntar.

El río Colorado abastece a 40 millones de personas en los estados de Arizona, California, Colorado, Nevada, Nuevo México, Utah y Wyoming, así como a una industria agrícola que genera 5.000 millones de dólares al año. "La gente ciertamente está preocupada", indicó Aaron, agregando que "uno mira la reserva y es preocupante".

El bajo nivel del agua en el lago Mead afecta asimismo a la industria recreativa y a la eficacia de la generación de energía hidroeléctrica de la presa Hoover. Las reservas del embalse no se usarán para determinar las entregas de agua a Arizona, California y Nevada del próximo año hasta que la Oficina de Recuperación emita su proyección oficial en agosto. La agencia ya ha anunciado que tiene previsto declarar una alerta de escasez por primera vez en la historia, que provocará cortes de abastecimiento en Arizona y Nevada.

Los niveles del lago Mead son fluctuantes a lo largo del año y dependen de los patrones climáticos, el consumo y la evaporación. Las autoridades calculan que la elevación del agua caerá a los 324 metros antes de empezar a recuperarse en noviembre, cuando disminuyan las necesidades de la agricultura, detalló Aaron.