El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció una "respuesta sin precedentes" para afrontar la "crisis" de los migrantes en situación irregular que intentan cruzar de México a EE.UU., que incluye la construcción de su propio muro fronterizo y "arrestos masivos ".
En una serie de mensajes en su cuenta de Twitter, el republicano escribió que comenzarán a hacer detenciones de las personas que ingresen de forma irregular a Texas. "Recibirás un pase directo para la celda de una cárcel", advirtió a quienes intenten hacerlo.
"La crisis fronteriza no es motivo de risa", dijo el gobernador, agregando que ante la "ausencia del Gobierno federal, Texas está tomando medidas adicionales para asegurar la frontera y restaurar el orden".
El jueves, Abbott participó en una cumbre fronteriza en la ciudad texana de Del Río. Previamente dijo que la afluencia de migrantes está "fuera de control" y que la crisis es resultado que que la administración de Joe Biden abriera las fronteras e "invitara" a los migrantes.
En su opinión, Biden no estaba preparado para atender esta situación "ni para lo que vendrá en los próximos meses". "Si bien asegurar la frontera es responsabilidad del Gobierno federal, Texas no se quedará de brazos cruzados", agregó el republicano.
Entre sus determinaciones se encuentra el levantamiento de barreras fronterizas en Del Río, lo que permitirá que el Departamento de Seguridad Pública de Texas detenga a los migrantes por violaciones de varias leyes de ese estado. Para estas acciones se aprobaron 1.000 millones de dólares.
Las licencias de cuidado infantil, sin efecto
El gobernador también afirmó que quiere trabajar con funcionarios locales y de otros condados para comenzar a realizar "arrestos masivos". Además, creó la primera Fuerza de Seguridad de la Frontera de Texas, que incluirá varias agencias estatales y un sistema de cárceles.
La semana pasada, el gobernador declaró el estado de emergencia ante el incremento en el flujo migratorio y dejó sin efecto las licencias estatales de cuidado infantil a los albergues de menores migrantes que viajan solos o sin representantes legales.
En mayo pasado, los agentes de la patrulla fronteriza detuvieron en Del Río, sede del condado de Val Verde, a 27.890 migrantes, lo que significa un aumento de 1.118 % con respecto a mayo de 2020, que fue de 2.289 personas, según un informe de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas e inglés).
La crisis económica en los países de origen de los migrantes se ha agravado con la pandemia, por lo que miles han tenido que abandonar sus comunidades en busca de oportunidades de trabajo a EE.UU.
A principios de mes, Biden dio por finalizado el programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés), mediante el cual deportó a México a unos 68.000 centroamericanos que solicitaron asilo en EE.UU. y que fueron obligados a esperar la resolución de sus casos en el país vecino.