La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha anunciado que los líderes mundiales que participaron en la cumbre del G7 acordaron descarbonizar el sector energético y se comprometieron a reducir a cero las emisiones netas para el año 2050 y limitar el aumento de la temperatura promedio global no más de 1,5 grados centígrados.
"El acuerdo del G7 para acabar con la financiación del carbón a nivel mundial es un gran logro y envía un fuerte mensaje al mundo", sostuvo Von der Leyen, al indicar que actualmente el 25 % de la energía utilizada en los países de la Unión Europea proviene de fuentes renovables, y para el año 2030 planean aumentar este porcentaje hasta el 38 %.
Asimismo, los líderes del G7 acordaron aumentar sus contribuciones para cumplir con el compromiso de destinar 100.000 millones de dólares al año para ayudar a los países más pobres a reducir las emisiones de carbono, haciendo frente al calentamiento global.
En el borrador del comunicado, visto por Reuters, EE.UU., Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón señalaron que van a "movilizar 100.000 millones de dólares anuales de fuentes públicas y privadas hasta 2025".
"Con este fin, nos comprometemos a aumentar y mejorar todas nuestras contribuciones públicas internacionales globales para la financiación del clima durante este período y pedimos a otros países desarrollados que se unan y aumenten sus contribuciones a este esfuerzo", se afirma en el documento.