Los últimos soldados alemanes abandonan Afganistán después de casi 20 años de misión de la OTAN

El Ministerio de Defensa germano calificó la retirada de las tropas como el "final de un capítulo histórico".

La ministra de Defensa de Alemania, Annegret Kramp-Karrenbauer, anunció que las tropas del país se han retirado completamente de Afganistán después de participar de la misión de la OTAN 'Resolute Support' durante casi dos décadas.

"Esta noche, los últimos soldados de la Bundeswehr han salido de Afganistán con seguridad. Después de veinte años, nuestra misión más intensa en el extranjero ha llegado a su fin", escribió Kramp-Karrenbauer en Twitter.

"Este es el final de un capítulo histórico, un esfuerzo intenso que nos ha desafiado y moldeado", agregaron desde el Ministerio de Defensa germano.

La ministra también expresó su "gran agradecimiento a los más de 150.000 hombres y mujeres" que han servido en el país asiático desde que Alemania se uniera a la misión liderada por Estados Unidos en 2001. Durante el tiempo de la misión, los militares germanos sufrieron 59 bajas mortales.

Este martes, las últimas tropas alemanas que quedaban en Afganistán despegaron en un avión desde la base aérea de Camp Marmal, cerca de la ciudad de Mazar-i-Sharif, en el norte del país, tras lo cual la base fue entregada formalmente al Ejército afgano, informan medios alemanes.

Por su parte, EE.UU. planea dejar un contingente de aproximadamente 650 soldados en Afganistán para proteger a diplomáticos después de que el Pentágono complete la retirada general de sus tropas del país, que en gran parte ocurrirá en las próximas dos semanas.

Sin embargo, según algunas informaciones, ahora los funcionarios de la Casa Blanca están alentando al Ejército a desacelerar el ritmo de la retirada en medio de los informes sobre avances de los talibanes en la región.

Al mismo tiempo, un reciente análisis de la comunidad de inteligencia de EE.UU. apuntó a que el Gobierno de Afganistán, encabezado por el presidente Ashraf Ghani, podría colapsar entre seis y doce meses después de que todas las tropas estadounidenses sean retiradas del país.