Samuel Luiz, el joven de 24 años asesinado el sábado en España, estaba junto a su amiga Lina cuando recibió la paliza mortal. Se encontraban cerca de una discoteca en el paseo marítimo de la ciudad de A Coruña hablando por videollamada con otra amiga, Vanessa. Hacían planes para el día siguiente.
"Pasaron un chico y una chica y él se puso a gritar que paráramos de grabarlos. Les explicamos que estábamos en una llamada y dirigiéndose a Samuel dijo: 'Para de grabarnos si no quieres que te mate, maricón'", explica Lina en una entrevista a un programa de Telecinco.
"Maricón de qué", respondió Samuel. El agresor solo necesitó escuchar esa frase para lanzarse hacia él, tirarlo al suelo y comenzar a pegarle. Su amiga intentó sin éxito separarlos y un chico consiguió ayudarla.
La cosa parecía haberse calmado, pero la joven se giró y vio "a un montón de gente corriendo". "Empecé a pedir auxilio porque estaban matando a mi amigo. Pedí por favor que no le pegaran, él estaba inconsciente en el suelo", relata.
Lina corrió buscando ayuda y, al regresar, vio que Samuel ya estaba inconsciente. "Había un señor que me estaba ayudando. Lo pusimos de lado. Él le aguantaba la cabeza, yo le saqué la lengua para que no pudiera tragársela. Y ahí ya llegaron los locales, las ambulancias y estuvieron con él en todo momento", recuerda.
Los servicios médicos intentaron reanimarlo y después fue trasladado a un hospital donde se confirmó su fallecimiento.
La joven no titubea cuando se le pregunta si fue un crimen motivado por la orientación sexual de Samuel: "Fue un crimen homófobo, totalmente. Cuando lo estaban agrediendo le decían 'maricón de mierda'".
Tres detenciones
La Policía Nacional ha detenido a tres personas, de entre 20 y 25 años, como presuntos autores y nos descarta más arrestos en las próximas horas. Tanto las declaraciones de los testigos como las cámaras de vigilancia que registraron el crimen son claves en la investigación.
El delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, pidió la colaboración ciudadana para esclarecer los hechos. "El que sepa o pueda ofrecer algún dato fiable, que lo haga", dijo Miñones, quien aseguró que "no se descarta ninguna hipótesis".
Sin embargo, representantes de varios partidos políticos e incluso algunas ministras del Ejecutivo ya han calificado el crimen como un delito de odio.
Masivas protestas
La muerte del joven ha conmocionado a la sociedad española y ha avivado el debate sobre la homofobia. Las redes sociales se han llenado estos días de testimonios de personas contando sus vivencias personales.
Según los datos del Ministerio del Interior sobre delito de odio por orientación sexual e identidad de género, entre 2018 y 2019 los ataques homófobos pasaron de 256 a 278.
Unas cifras que distan mucho de los de las ofrecidas por las asociaciones LGTBI. Solo en la Comunidad de Madrid, el Observatorio contra la LGTBFobia registró 321 incidentes de odio en 2019.
Las organizaciones aseguran que estas agresiones –que la mayoría no se denuncian– no hacen más que aumentar. También alertan que desde el partido de extrema derecha Vox se fomenta el discurso del odio a través de sus numerosas declaraciones contra el colectivo LGTBI.
Una de las iniciativas impulsadas por esta formación ha sido el 'pin parental', una propuesta que permitiría a los padres vetar la presencia de sus hijos en actividades para concienciar sobre la LGTBIfobia.
El partido que lidera Santiago Abascal también se ha mostrado abiertamente en contra del anteproyecto de 'ley trans' aprobado recientemente por el Consejo de Ministros.
Varios colectivos convocaron el martes protestas en distintas ciudades españolas para denunciar la muerte de Samuel. En una oleada de indignación y conmoción, miles de personas salieron a las calles pidieron justicia y con pancartas en las que se podía leer: "Cualquiera de nosotras podría ser Samuel".
En Madrid, la concentración terminó con cargas policiales y un detenido. Varios representantes políticos han pedido explicaciones al Gobierno.
Jaume Asens, presidente del Grupo Confederal de Unidas Podemos en el Congreso, exigió "una investigación para depurar responsabilidades". Mientras que el líder de Más País, Íñigo Errejón, criticó la actuación de la Policía.
"No podemos pedir que las agresiones LGTBI se denuncien en la Policía y tener una Policía que nos ha dejado las imágenes que nos ha dejado en la retina", comentó la portavoz de Más Madrid en la Asamblea regional, Mónica García.
La Delegación del Gobierno de Madrid dijo que analizará las imágenes y estudiará la actuación policial. El organismo lamentó "profundamente que la concentración contra el crimen de Samuel fuese empañada por unos incidentes que nada tienen que ver con el grito sano de Madrid contra la homofobia".