Pfizer y BioNTech están impulsando esfuerzos para desarrollar una tercera dosis de su vacuna para conseguir un máximo nivel de protección contra las nuevas variantes del covid-19, afirmaron ambas compañías en una declaración conjunta que ha desatado la oposición de dos reguladores estadounidenses.
Al citar datos divulgados este lunes por el Ministerio de Salud de Israel, que indican una disminución en la efectividad de la vacuna de Pfizer/BioNTech contra el coronavirus para prevenir las infecciones, y en medio de la propagación de la variante Delta, las compañías afirmaron creer que "una tercera dosis se necesitará dentro de 6 a 12 meses tras la vacunación completa".
Según datos de sus propios estudios, las empresas señalan que una tercera dosis de su vacuna, administrada un medio año después de las dos primeras, aumentará en 5 a 10 veces los valores de anticuerpos neutralizadores del tipo nativo y de la variante Beta del covid-19. Pfizer y BioNTech pronostican un resultado similar de protección contra la variante Delta.
Pocas horas después de esa declaración, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades anunciaron que los estadounidenses ya vacunados con dos dosis no necesitan una tercera.
"Estaremos preparados para dosis de refuerzo cuando y en caso de que la ciencia demuestre su necesidad", reaccionaron los reguladores en una declaración conjunta.
Ambos acentuaron que "las personas vacunadas completamente están protegidas contra la posibilidad de enfermarse de manera severa y la muerte, incluso a causa de las variantes que van circulando en el país, como la Delta".
Conforme a datos israelíes, y pese a mantener una fuerte protección contra formas graves de la enfermedad, la efectividad del fármaco de Pfizer/BioNTech cayó al 64 % con respecto a la prevención de infecciones sintomáticas durante el último mes, informó el organismo, señalando que la disminución coincidió con la rápida propagación de la más contagiosa variante Delta en todo Israel.
Los nuevos datos se producen en medio de un leve aumento de los contagios en Israel, donde el total de casos activos llegó el lunes a 2.766, tras confirmarse 369 nuevas infecciones. Se cree que la variante Delta representa más del 90 % del total.