México vive una emergencia en términos de violencia contra las mujeres, como lo demuestra el creciente número de casos de feminicidio y violencia intrafamiliar registrados durante los primeros seis meses del año.
En promedio, cada ocho horas se reporta un feminicidio en ese país latinoamericano, según el 'Reporte semestral de incidencia delictiva 2021' del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), publicado este jueves.
Con base en las carpetas de investigación abiertas por las fiscalías estatales, la organización informó que, estadísticamente, cada día se registran tres feminicidios en México. En el primer semestre de 2021, este delito creció en 2,29 % con respecto al mismo período del año anterior.
"El feminicidio todos los años ha venido creciendo, desde 2015 a la fecha. Sigue rompiendo récord tras récord", dijo el director del ONC, Francisco Rivas, al presentar el informe.
En grave peligro
El Observatorio Nacional Ciudadano contabilizó en ese período 1.391 homicidios dolosos contra mujeres, lo que incluso elevaría la nefasta tasa a entre siete y ocho asesinatos de esa índole cada día.
Por otra parte, las autoridades mexicanas han abierto entre enero y junio 129.020 investigaciones por violencia familiar, lo que representa unos 713 casos cada día. Esto implica un alza de 137 indagatorias por jornada, en comparación con el primer semestre de 2020.
Las denuncias por violación también aumentaron en los primeros seis meses del año. En promedio, cada 25 minutos se reporta una. "Las violaciones, tanto simples como equiparadas, se han incrementado respecto al promedio de los 12 meses anteriores en 26 entidades", informó la organización.
Al analizar la información que arroja la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el ONC detalló que una de cada cuatro mujeres mayores de 18 años enfrentaron alguna situación de acoso o violencia sexual durante el primer semestre de 2021.
"México es uno de los países más peligrosos para ser mujer", señaló Rivas, al advertir que estas cifras tan solo representan una porción del problema, ya que la gran mayoría de esos delitos no son denunciados ante las autoridades y, por lo tanto, no son investigados ni esclarecidos.