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Elon Musk critica públicamente a Apple por la gran cantidad de cobalto que utiliza en la fabricación de las baterías de sus dispositivos
El gerente general de Tesla señaló también a la empresa tecnológica por el llamado "jardín amurallado" con el que controlan qué aplicaciones pueden ser instaladas en iPhones y iPads.
Durante la presentación del balance trimestral de Tesla celebrada este lunes, el gerente general y fundador de la compañía, Elon Musk, criticó a Apple por la gran cantidad de cobalto que la firma tecnológica utiliza para producir las baterías de sus dispositivos.
Cuando el empresario fue cuestionado acerca de las cadenas de suministro de los materiales utilizados por Tesla para fabricar sus vehículos, este aseguró que existe una idea equivocada respecto a la cantidad de cobalto, material indispensable en la producción de la células de iones de litio utilizadas en las baterías de los coches eléctricos y dispositivos electrónicos, usado durante el proceso.
"Apple utiliza, creo, casi el 100 % de cobalto en sus baterías y teléfonos móviles y portátiles, pero Tesla no utiliza cobalto en los paquetes de fosfato de hierro, y casi nada en los químicos basados en níquel. En una media ponderada, podríamos utilizar un 2 % de cobalto", apuntó Musk, citado por CNBC.
Del mismo modo, el director de Tesla criticó el llamado "jardín amurallado" de Apple, con el que ejerce un control estricto sobre qué 'software' puede instalarse en los iPhone y iPads a través de su App Store, cuando se le preguntó sobre el hecho de permitir a sus competidores utilizar su red de cargadores.
Según el ejecutivo, el hecho de permitir el libre uso de sus cargadores "enfatiza" el objetivo de su compañía de "apoyar la llegada de la energía sostenible". Tesla no pretende crear "un jardín amurallado y utilizarlo para aporrear a nuestros competidores, algo que utilizan algunas empresas" como "Apple", particularizó Musk en medio de una tos fingida.
De acuerdo a un artículo publicado por The Guardian, ambas empresas, junto con Google, fueron demandadas en 2019 por los padres de niños mineros de cobalto que fallecieron o resultaron heridos en la República Democrática del Congo durante la extracción del mineral, posteriormente usado por las firmas. En la querella, los acusados son señalados por cuestiones relacionadas con la violación de derechos humanos y explotación infantil.
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