Este 27 de julio ha comenzado el juicio del excardenal Giovanni Angelo Becciu, de 73 años, acusado de haber gastado fraudulentamente cantidades millonarias de dinero de la Iglesia, informó Reuters. Es la primera vez que un cardenal se sube al banquillo de los acusados en una corte penal de primera instancia en el Vaticano.
Además de Becciu, otras nueve personas y cuatro empresas están siendo enjuiciadas por sus vínculos con una inversión de la Secretaría de Estado de la Santa Sede en un negocio inmobiliario en Londres (Reino Unido). Entre los acusados se incluyen otros cuatro exfuncionarios del Vaticano y los empresarios italianos que manejaron las inversiones en la capital británica.
Becciu, quien hasta 2018 fue subsecretario de Estado, uno de los cargos más poderosos e influyentes del Vaticano, estaría envuelto en un controvertido acuerdo con dinero de la Iglesia para comprar un lujoso edificio en el barrio londinense de Chelsea por 412 millones de dólares, a modo de inversión. Según documentos judiciales, habría estado desviando también sustanciales sumas de dinero de "limosnas y donaciones para financiar actividades de personas cercanas a él".
En septiembre, Becciu renunció a su puesto y su cargo como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, decisión que fue aceptada por el papa Francisco.
Tanto Becciu como el resto de los acusados se han declarado inocentes de los cargos que se les imputan.