Reino Unido respaldó el plan de cobrar la entrada a Europa a los viajeros que no pertenecen a la UE
Reino Unido fue uno de los partidarios de los planes de la Unión Europea (UE) para exigir a los ciudadanos de los países, que actualmente están exentos de visa para entrar en el Espacio Schengen, que obtengan una autorización y paguen una tarifa para ingresar a los territorios que forman parte de esta zona, según fuentes de The Guardian.
El Gobierno de David Cameron apoyó la idea cuando esta fue lanzada por la Comisión Europea en abril de 2016, tres meses antes del referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la UE, cuando pocos esperaban que la tarifa de siete euros (unos ocho dólares) algún día podía afectar a los viajeros británicos, tras la salida del país del bloque comunitario.
Sin embargo, este martes la Comisión Europea confirmó su plan para el Sistema de Información y Autorización de Viajes (ETIAS, por sus siglas en inglés) que empezará a regir a finales de 2022 y será un requisito obligatorio para la entrada de los turistas a los 26 países que conforman la Zona Schengen.
El proceso de solicitud del ETIAS
Cuando entre en vigencia el nuevo sistema, los pasajeros tendrán que llenar un formulario de solicitud en línea antes de viajar. Tras responder a las preguntas de seguridad y facilitar sus datos personales, los nombres de los pasajeros se cotejarán con las bases de datos policiales. Una vez que hayan completado el documento, deberán pagar una tarifa. La mayoría de las solicitudes se procesarán en minutos.
La respuesta del Reino Unido
No obstante, el Gobierno de Boris Johnson no prevé imponer una tarifa recíproca para los viajeros de la UE que desean ingresar al Reino Unido.
"Creo que no tenemos planes de hacer eso", comentó Michelle Donelan, la ministra de Universidades del Reino Unido en una entrevista para LBC. "Ya tenemos nuestros planes de visado delineados".