Edith Murway-Traina, que el 8 de agosto cumplirá 100 años, es la levantadora de pesas más anciana del mundo, según la certificó este jueves el libro Guinness de los récords.
Originaria de Florida (EE.UU.) y capaz de levantar de 18 a 68 kilos, la mujer empezó a entrenar a sus 91 años junto con una cercana amiga, Carmen Gutworth, que la que invitó a unírsele en un gimnasio, donde la actual poseedora del récord inmediatamente se interesó en el levantamiento de pesas.
"Al ir de manera constante, descubrí que lo estaba disfrutando y me desafiaba a mí misma para mejorar", dijo la atleta, cuya determinación la llevó a ganar posteriormente varios trofeos.
El secreto de la longevidad
Murway-Traina reconoce que siempre le ha gustado ser reconocida por sus logros y captar la atención de la gente, lo que ha ido creciendo gracias a sus éxitos deportivos.
"Como intérprete y bailarina, los aplausos siempre fueron una parte muy importante de mi disfrute. Mientras pude recibir aplausos, estaba más que feliz", confesó la mujer, que antes trabajaba como profesora de danza en una escuela local.
"Creo que en mis noventa me volví más consciente de la necesidad de las personas de ser reconocidas por lo que son, o por cómo son, y es lo más hermoso del mundo. Creo que sobrevivo gracias a eso", reiteró al explicar sus motivaciones.