Fiscalía peruana decide investigar al primer ministro y a dos importantes políticos por presunto terrorismo

Este miércoles, la Fiscalía Supraprovincial Especializada en Delitos de Terrorismo y Lesa Humanidad de Huánuco, en Perú, inició una pesquisa preliminar en contra de tres reconocidas figuras de la política nacional: Guido Bellido, primer ministro en funciones (cuyo título oficial es presidente del Consejo de Ministros); Vladimir Cerrón Rojas, fundador del partido político gobernante, Perú Libre (PL); y Guillermo Bermejo, congresista por el PL, por su presunta responsabilidad en la comisión del delito de terrorismo, informaron las autoridades a través de un comunicado.

El caso en cuestión, que apunta contra figuras claves en las filas del recién estrenado presidente Pedro Castillo, se inicia a raíz de una denuncia del presidente de la Asociación Plurinacional de Reservistas Tahuantinsuyanos, Eddy Bobby Villarroel Medina, quien acusa a los tres políticos de presuntas vinculaciones con la organización terrorista Sendero Luminoso del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, que se hace llamar el Militarizado Partido Comunista del Perú.

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Durante las indagatorias, que se prolongarán por 120 días, también será investigado el escritor y poeta José Pimentel Vidal, quien supuestamente habría sido el vínculo entre Cerrón y Víctor Quispe Palomino, uno de los cabecillas de la organización terrorista.

Ante las acusaciones, el fundador del PL respondió con ironía a través de sus redes sociales y aseguró ser nuevamente perseguido por sus ideas políticas. "Otra nueva denuncia por terrorismo, ¿a alguien le cabe duda que existe una persecución política severa?", cuestionó a través de un tuit.

Desde que Pedro Castillo anunciara a los miembros de su Gabinete en una ceremonia de juramentación simbólica celebrada en Ayacucho, el mandatario se ha enfrentado a fuertes presiones y críticas por parte de la oposición partidaria y mediática por la supuesta falta de idoneidad de varios de los funcionarios designados, situación que ha ocasionado una confrontación entre el Ejecutivo y la oposición legislativa.

Entre los funcionarios señalados como no aptos para ocupar los cargos dentro de la Administración de Castillo, destaca la figura Guido Bellido, nombrado presidente del Consejo de Ministros, cuya designación fue rechazada de manera unánime por los congresistas de derecha, principalmente por sus supuestos nexos con miembros de alto nivel del Sendero Luminoso.