El presidente turco Recep Tayyip Erdogan ha declarado que su país no aceptará refugiados de Afganistán y pidió a la Unión Europea que asuma la responsabilidad de los migrantes procedentes de esa nación, informa Reuters.
El mandatario ha asegurado que no convertiría a Turquía en "la unidad de almacenamiento de migrantes de Europa" ante el éxodo de refugiados de Afganistán tras la toma de poder de los talibanes.
Según Erdogan, Ankara ya ha tomado medidas a lo largo de sus fronteras con Irán, una ruta clave para los migrantes afganos hacia Turquía. El presidente también admitió que está listo para sentarse a la mesa de negociaciones con miembros del movimiento talibán para resolver juntos "nuestras agendas comunes".
El pasado domingo, los talibanes tomaron Kabul y dieron por finalizada su ofensiva por todo Afganistán, mientras el presidente Ashraf Ghani renunciaba a su cargo y abandonaba el país.
La llegada de los insurgentes a la capital afgana provocó que una multitud de personas se apresuraran a huir del territorio, lo que se tradujo en grandes atascos en las carreteras y en estampidas en el aeropuerto de la ciudad. Las trágicas escenas que mostraron a individuos mientras intentaban aferrarse a los aviones que despegaban de la pista, acapararon la atención de todo el mundo.
Ante esta situación, el presidente de EE.UU., Joe Biden, anunció que destinará 500 millones de dólares del fondo federal de emergencia para satisfacer "las necesidades urgentes inesperadas de refugiados, migrantes, víctimas de conflictos y de otras personas en riesgo como resultado de la situación en Afganistán".