Tras casi siete años de la guerra civil, la población de Yemen sufre una terrible situación humanitaria que se ha agravado más con la crisis vinculada a la pandemia de coronavirus. Los niños son un grupo especialmente afectado por las privaciones, según declaraciones de la directora ejecutiva del Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef), Henrietta Fore, presentadas ante el Consejo de Seguridad de la ONU este lunes.
En particular, Fore señaló que 21 de los 28 millones de habitantes de Yemen necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir. De ellos, 11,3 millones son menores. 2,3 millones de niños padecen desnutrición aguda, de los cuales 400.000 corren "un riesgo inminente de muerte". Además, más de 10 millones de menores y 5 millones de mujeres no tienen acceso a servicios de sanidad básicos.
"En Yemen, un niño muere cada 10 minutos por causas prevenibles, incluidas la desnutrición y las enfermedades prevenibles mediante vacunación", indicó la directora de la Unicef.
Según Fore, desde el 2015 el PIB del país ha caído en un 40 %, provocando un fuerte desplome de ingresos familiares. "Hay alimentos en Yemen, pero quienes no pueden pagarlos corren el riesgo de morir de hambre", resaltó la directora.
Además de la desnutrición y falta de acceso a la sanidad, a los menores yemeníes los amenaza el colapso del sistema educativo.
"Dos tercios de los maestros […] no han recibido un salario regular durante más de cuatro años. […] Esto pone a unos cuatro millones de niños más en riesgo de interrumpir la educación o abandonar la escuela, ya que los maestros no remunerados dejan de enseñar para encontrar otras formas de mantener a sus familias", dijo Fore y señaló que los que dejan la educación acaban "atrapados en un ciclo de pobreza que se perpetúa".
La guerra civil yemení se inició en septiembre de 2014 con la rebelión del grupo Ansar Allah, conocido como los hutíes, en el norte del país. Desde marzo de 2015, viene agravada por la intervención de una coalición internacional progubernamental liderada por Arabia Saudita.
En diciembre pasado, la ONU estimó en alrededor de 233.000 las pérdidas humanas del conflicto, de las cuales 131.000 habrían sido provocadas por causas indirectas, como desnutrición y falta de sanidad. Entonces, hubo más de 3.000 niños víctimas directas de la guerra.
En 2018, la organización no gubernamental británica Save the Children calculó que entre mayo de 2015 y octubre de 2018 solo por desnutrición habrían fallecido unos 85.000 niños menores de 5 años.