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Autoridades bolivianas ratifican que la decisión sobre la defensa en libertad de Áñez depende de la Justicia
La expresidenta de facto pedirá a un juez de garantías que le otorgue una medida de prisión domiciliaria por su "salud e integridad".
La Fiscalía General de Bolivia apuntó este jueves que corresponde a la Justicia decidir sobre el estado procesal de la expresidenta de facto, Jeanine Áñez, quien se encuentra recluida en el Centro Penitenciario Femenino Miraflores de La Paz por su responsabilidad en el golpe de Estado contra Evo Morales.
El secretario general de la Fiscalía, Edwin Quispe, afirmó que el Ministerio Público no define ninguna situación procesal, debido a que las autoridades jurisdiccionales son las instancias encargadas de analizar y resolver peticiones como la realizada por la defensa de Áñez, que pide que su clienta enfrente su juicio en libertad, alegando un supuesto deterioro en su salud.
Quispe respondió a medios locales sobre el pedido que hizo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a la Cancillería de Bolivia, solicitando que remita información sobre el estado de salud física y mental de Añez en un plazo de máximo siete días.
"Ha circulado el rumor de que dependería del Ministerio Público determinar la situación solicitada por la CIDH. Sin embargo, el tenor de la Comisión señala claramente como punto de referencia al Órgano Ejecutivo que tiene en sus manos la solicitud de la Comisión Interamericana", apuntó Quispe en un comunicado de prensa.
El secretario de la Fiscalía aclaró que el Ejecutivo tendría ese plazo de siete días para responder a la CIDH y poner "en consideración de la autoridad jurisdiccional alguna petición" sobre la situación procesal de Áñez.
Áñez pide libertad domiciliaria
Desde la cuenta de Twitter de Áñez, se informó que la defensa de la expresidenta de facto pedirá a un juez de garantías que le otorgue una medida de libertad domiciliaria por su "salud e integridad".
"Desde ayer [miércoles] han restringido el acceso de médico y su abogado", expresaron en un tuit.
Las quejas realizadas por Áñez han tenido un cariz contradictorio. El pasado 24 de agosto, fue publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que manifestaban que la exmadandataria de facto ya no quería recibir más medicamentos.
Especialistas que la revisaron han documentado que Áñez sufre de un trastorno depresivo mayor grave con ideación suicida, probable polineuropatía periférica y síndrome conversivo disociativo, hipertensión arterial sistémica, entre otros.
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