La policía antidisturbios se enfrentó este domingo a varios manifestantes en Cetiña (Montenegro), que bloquearon las carreteras para protestar contra la investidura de un nuevo líder de la Iglesia ortodoxa serbia, informan medios locales.
Los agentes utilizaron gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento para dispersar la multitud en el centro de Cetiña y anunciaron haber detenido a ocho personas. Cuatro manifestantes y oficiales resultaron heridos, incluido Ranko Krivokapic, expresidente del Parlamento de Montenegro y presidente del Partido Socialdemócrata del país. La Autoridad Policial de la nación destacó que había actuado con perseverancia y eficacia, y aseguró que responsabilizará a todos los culpables.
A pesar de los disturbios, el arzobispo metropolitano Joanikije ha sido nombrado hoy como un nuevo líder de la Iglesia ortodoxa serbia en el monasterio de Cetiña tras una solemne liturgia.
Entre los manifestantes figuran miembros de grupos nacionalistas y partidarios de la Iglesia ortodoxa montenegrina no reconocida canónicamente y que se contrapone con la Iglesia ortodoxa serbia, que sigue considerando a Montenegro parte de Serbia, a pesar de su independencia en 2006.