La bancada del partido gobernante Perú Libre pidió la salida inmediata de la presidenta del Congreso, María del Carmen Alva, por considerar que sus declaraciones sobre una vacancia del presidente Pedro Castillo son golpistas.
Alva expresó en una entrevista con el diario Trome que, aunque no hay un pedido de vacancia presidencial desde el Congreso contra Castillo, es la "calle" la que "pide vacancia presidencial". Este planteamiento, común en los sectores políticos opositores, ha estado acompañado de un fuerte cuestionamiento de los miembros del gabinete de Castillo, a quienes se relaciona con el terrorismo y la corrupción a través de los medios de comunicación.
El comunicado en rechazo a estas afirmaciones de la presidenta del Congreso fue publicado en la cuenta de Twitter del grupo de parlamentarios del partido izquierdista, cuyo líder, Vladimir Cerrón, también ha sido señalado de estar vinculado a casos de corrupción, por lo que se le han abierto dos investigaciones que han sido catalogadas por él como una "persecución política".
¿Qué dice el comunicado?
En el texto se manifiesta que las afirmaciones de la congresista, que pertenece al partido tradicional de derecha Acción Popular, "reflejan la oscura intención de desestabilizar y debilitar el sistema democrático".
"Incitar, azuzar la ruptura de un gobierno democráticamente elegido constituye una gravísima y grosera actitud antidemocrática y golpista", considera Perú Libre en su escrito.
La bancada del partido izquierdista asevera que Alva estaría al frente de una campaña para buscar la vacancia del mandatario, donde también participarían "grupos extremistas, radicales y fascistas que buscan desestabilizar la democracia en Perú".
El discurso de la presidenta del Parlamento está en la misma línea de los congresistas que se oponen a Castillo. La mayoría coincide en que existe una "crisis de gobernabilidad", cuando apenas cumplió los primeros treinta días de mandato; en que la población pide un "cambio" de gabinete y en que hay una supuesta opacidad del presidente frente a Cerrón, que "da las órdenes".
Hasta ahora, en el país suramericano no ha habido movilizaciones importantes o iniciativas ciudadanas para pedir la salida de los ministros o del presidente, que obtuvo la mayoría de los votos y una amplio respaldo en las zonas rurales del Perú.