Más de 80 organizaciones mexicanas presentaron a rAborta, una robot que entrega pastillas abortivas en 11 estados en donde la interrupción voluntaria del embarazo todavía está criminalizada.
La robot, que porta el pañuelo verde que simboliza esta lucha, está manejada desde la Ciudad de México, en donde el aborto es legal desde 2007, por lo tanto en términos estrictos nadie está violando la ley ya que la mifepristona y el misoprostol, los medicamentos abortivos, son entregados en mano por un aparato, no por una persona. Es decir, es como si la mujer o la persona gestante hubieran abortado en la capital.
El proyecto se puso en marcha esta semana en el marco del Día de la Acción Global por el Acceso al Aborto Legal, Seguro y Gratuito que incluyó marchas masivas en las principales ciudades de América Latina.
En el caso de México, rAborta fue presentada en Baja California, Chiapas, Coahuila, Guanajuato, Chihuahua, Estado de México, Nuevo León, Morelos, Sinaloa, Sonora y Tamaulipas, estados con las mayores restricciones para realizar una interrupción voluntaria del embarazo.
El procedimiento inicia cuando las mujeres que desean abortar se contactan con alguna de las organizaciones feministas en su respectivo estado. Las colectivas les ayudan a que un médico o médica les prescriba la receta desde la Ciudad de México. Por último, también desde la capital, operan a rAverta para que entregue las pastillas.
Avances
La iniciativa, que está apoyada por las organizaciones Women on Web y la Fundación Marie Stopes México, se lanzó en un momento en el que hay una serie de avances con respecto al aborto en México.
Hasta ahora, la interrupción legal del embarazo sólo es legal en la Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo y Veracruz. Sin embargo, el pasado 7 de septiembre la Suprema Corte despenalizó el aborto en Coahuila en una histórica sentencia que sienta jurisprudencia, lo que significa una despenalización a nivel nacional.
Los códigos penales de cada estado deberían reformarse para eliminar la criminalización que sufren las mujeres, las personas gestantes y los profesionales de la salud que participan en los abortos pero, mientras ello ocurre, las feministas avanzan con proyectos como rAborta.
Además, la bancada oficialista en el Senado ya anunció que presentará una iniciativa para reformar la Ley General de Salud con el fin de que incluya el derecho al aborto en los servicios médicos públicos y privados. Esto permitiría avanzar de la despenalización a la legalización.
Women on Web explicó en un comunicado que, hasta el fallo de la Corte, el aborto era ilegal en la mayor parte del país, excepto en casos de violación y, en algunas zonas, si la vida de una mujer estaba amenazada.
"La robot del aborto está destinada a simbolizar la dependencia de las mujeres de la tecnología para cumplir con sus derechos", señaló al precisar que no se viola ningún Código Penal porque todo el sistema funciona desde la Ciudad de México.
"México, como muchos países, sufre un gran desequilibrio de acceso para muchas de sus ciudadanas ya que algunas tienen acceso legal y otras no. Para las mujeres que viven fuera de los cuatro estados mexicanos que han legalizado la atención del aborto, acceder al aborto seguro es difícil y requiere el apoyo y el acompañamiento de otras redes", recordó.
Por eso, dijo, la campaña rAborta tiene como objetivo "arrojar luz sobre la importancia de la igualdad de acceso para todos y exigir que todos los estados mexicanos legalicen el aborto".