El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, le mandó una carta al primer ministro de Israel, Naftalí Bennet, para pedirle su ayuda en el proceso de extradición en contra de Tomás Zerón, el exdirector de la Agencia de Investigación Criminal que está involucrado en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y que permanece prófugo en ese país.
"Nuestro país sufrió una de las agresiones históricas más graves a sus derechos humanos en las últimas décadas cuando, en 2014, fueron desaparecidos cuarenta y tres estudiantes normalistas en la ciudad de Iguala, Guerrero, en una acción brutal y despiadada en la que se coludieron miembros del narcotráfico y autoridades locales y federales", señala la misiva que este jueves leyó durante la conferencia presidencial Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos.
Este hecho delictivo, abusivo y desmesurado, agrega, "ha dejado una huella de dolor e impunidad que este nuevo gobierno, que me honro en encabezar, ha estado restañando en una labor sin precedentes de recuperación de la justicia, la transparencia y la rendición de cuentas".
En ese sentido, López Obrador explica que, desde que comenzó su Gobierno en diciembre de 2018, han sido detenidas por lo menos 49 personas y se ha procesado a los funcionarios federales y locales que se coludieron para desaparecer a los jóvenes estudiantes.
"El funcionario (Zerón) que, desde uno de los más altos niveles del orden federal, operó esta colusión criminal cometiendo, entre otros delitos, el de tortura, ha sido imputado por un juez a través de una orden de aprehensión que está ratificada por Interpol", dice la carta.
También recuerda que quien fuera uno de los funcionarios más importantes del Gobierno de Enrique Peña Nieto huyó a Israel el 13 de agosto de 2019 y, desde entonces, tanto las autoridades de procuración de Justicia como la Secretaría de Relaciones Exteriores de México han trabajado con sus pares en Israel para obtener la extradición.
Reclamos y espera
"A diario, el clamor de los padres y madres de quienes fueron desaparecidos y de aquellos que ya fueron identificados sus restos nos exige, con toda razón, que se cumpla de inmediato con la justicia en el caso del citado individuo", señala.
Por eso, añade, "con toda la atención y el respeto que me merecen la República de Israel y sus autoridades me dirijo a usted para solicitarle su valiosa atención en este proceso de extradición que es prioritario para nuestro país".
López Obrador considera que la lucha que ha liderado Israel en las reivindicaciones de los derechos humanos frente a la tortura y las violaciones que su pueblo ha sufrido ha sido ejemplar.
"Sabemos de su sensibilidad y solidaridad para un caso como el que nos ocupa, el cual tanto ha lastimado a nuestra comunidad y que es esencial resolver para devolverle la transparencia y la justicia a la vida pública de nuestro país, obteniendo también el reconocimiento y la reparación del daño para las víctimas directas y para centenares de familias mexicanas que exigen justicia", concluye la carta, que está fechada el pasado 23 de septiembre.
Tres días más tarde, se cumplieron siete años de la noche en que los 43 estudiantes de la escuela normal rural Isidro Burgos, en Ayotzinapa, fueron víctimas de desaparición forzada después de una cacería en la que participaron policías municipales y estatales y militares y cuya investigación fue manipulada y entorpecida por el Gobierno de Peña Nieto.
¿Quién es?
Zerón, quien ya había ocupado altos cargos en Seguridad durante el Gobierno de Felipe Calderón, fue uno de los artífices de la llamada "verdad histórica" que Peña Nieto quiso imponer para hacer creer que las víctimas habían sido secuestradas y quemadas por el Cártel Guerreros Unidos con el fin de dar por cerrado el caso.
El Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI) y el Equipo Argentino de Antropología Forense demostraron que las autoridades mentían, lo que derivó en la salida de Zerón de la Agencia Criminal de Investigación, aunque después el propio Peña Nieto lo recompensó con otro cargo en el Consejo de Seguridad Nacional.
Cuando López Obrador llegó a la presidencia, la investigación se reabrió y Zerón, quien ya estaba acusado de delitos de tortura (como lo demuestran varios videos), desaparición forzada, alteración de la escena del crimen y pérdida y ocultamiento de pruebas, huyó a Canadá y después a Israel.