El expresidente de Perú Alberto Fujimori, quien cumple condena en prisión por delitos de lesa humanidad, se someterá este lunes a "la realización de un procedimiento invasivo cardiaco", informó el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe) en un comunicado.
El pasado viernes, Fujimori fue llevado del penal Barbadillo, en Lima, a la clínica Centenario Peruano Japonesa por un descenso en la saturación de su oxígeno. De acuerdo a lo que reportó el Inpe, los médicos que lo atendían dispusieron este 4 de octubre su trasladado a la unidad de cuidados intensivos de otra clínica local, donde será operado del corazón.
Por ese síntoma de descompensación, el exmandatario será transferido al sanatorio donde tiene cobertura de su seguro médico particular, siguiendo los protocolos de seguridad.
Horas antes del anuncio, su hija, la excandidata presidencial Keiko Fujimori, dijo que el estado de salud de su padre "es delicado".
"Su problema en el corazón se ha agudizado", escribió Keiko en su cuenta en la red social Twitter, y aseguró que tanto ella como su padre han dado el consentimiento a la clínica para que tome "otro tipo de medidas", aunque no especificó cuáles.
Alberto Fujimori, de 83 años, cumple una condena a 25 años de cárcel por los delitos de homicidio calificado, secuestro agravado y lesiones graves. Se encuentra alojado en el pequeño penal Barbadillo, ubicado en el cuartel de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía, al este de Lima, donde es el único recluso.
Desde que está en prisión, fue trasladado a clínicas en varias ocasiones por diferentes males crónicos propios de su avanzada edad, como hipertensión arterial, una hernia lumbar, gastritis, fibrilación auricular paroxística y unas lesiones en la lengua, conocidas como leucoplasia, de las que fue operado hasta seis veces.