En México, el tema energético también acapara la agenda política. Y aún más después de las recientes declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador sobre la importancia del litio para su país.
El mensaje del mandatario desató cierta polémica, al señalar que las reservas de litio deben ser explotadas exclusivamente por el Estado mexicano.
Ante esta controversia, cabe recordar un informe de una ONG canadiense que revela algunas peculiaridades de este sector en el país latinoamericano, que posee una de las principales reservas de este metal. Se calcula que 36 proyectos actuales en México están controlados por diez empresas extranjeras.
¿Especuladores extranjeros?
Lo curioso es que, de todas esas concesiones, el 84 % aún no están explotando dicho recurso, y se encuentran en proceso de tramitación.
Según el informe, la mayoría de estos proyectos pertenecen a empresas al borde de la quiebra. Además, no están en actividad debido a que únicamente habrían optado por la concesión de la explotación del litio para fines especulativos.
Un recurso estratégico
El litio, considerado por muchos como el petróleo del futuro a raíz de su relevancia para fuentes de energía de larga autonomía, hoy en día es un tema de importancia en el mundo financiero y energético.
Es por ello que el objetivo del presidente López Obrador es nacionalizar este mineral que se encuentra en el subsuelo mexicano, fortaleciendo así a la Comisión Federal de Electricidad.
"Se trata de un mineral estratégico. Sin ese mineral en manos de la nación, no podríamos desarrollarnos. Hay una disputa mundial de cómo las hegemonías quieren mantener el dominio sobre el litio", expresó el mandatario al respecto.
Prerrogativa del Estado
En este contexto, recientemente se dio a conocer que diferentes grupos mineros, que son los encargados de la mitad de producción de litio a nivel global, crearon una asociación mundial con sede en Londres para hablar en nombre de su sector.
Mientras tanto, en México hace unos días fue enviada al Congreso la iniciativa de reforma constitucional del sector energético, con lo que se busca modificar algunos artículos. De aprobarse, sería el Estado mexicano el único con la facultad de extraer, explotar, comercializar, distribuir y almacenar este recurso apodado como el 'oro blanco'.
"Si esta reforma pasa, estamos hablando de una reforma que es muy difícil de echar para atrás. Es decir, que las siguientes Administraciones tendrán que mantenerse con esta reforma", explica el economista y especialista en energía Paul Alejandro Sánchez.
"Porque requeriría otra vez conjuntar las tres cuartas partes de las fuerzas políticas del país para pasar una contrarreforma a nivel constitucional que permitiera abrir el litio a concesiones a empresas privadas y extranjeras", añade.
Mantener los acuerdos vigentes
Sin embargo, no hay que olvidar que en el país existen ya al menos ocho concesiones con empresas extranjeras para la extracción de litio. De acuerdo con el secretario de la Gobernación de México, Adán Augusto López, los compromisos ya firmados permanecerán vigentes, aunque ya no se entregarán más permisos.
"La reforma establece un parteaguas para las explotaciones adicionales a las nuevas que se están desarrollando actualmente en el país, que realmente es una, que tiene 50 % de capital chino. Es un movimiento geoestratégico para darle prioridad al desarrollo nacional sobre cualquier presión de producción extranjera", comentó Sánchez.
Ayuda de Bolivia
Según un informe del Servicio Geológico de EE.UU. (USGS, por sus siglas en inglés), México ocupa la novena posición a nivel mundial en reservas de litio.
En ese sentido, el Gobierno de Bolivia desde hace unos meses brinda asesoría a las autoridades mexicanas sobre la explotación de este mineral. Pues es precisamente el país andino el poseedor de la mayor reserva en el mundo entero.
Así, en el Congreso mexicano hoy está en discusión un tema que importa no solo a la nación sino a los países que desean hacer negocios en materia energética.
Si te ha parecido interesante, ¡compártelo con tus amigos!