La OTAN ha decidido retirar de su sede a ocho diplomáticos rusos bajo la sospecha de que son oficiales de inteligencia no declarados y suprimir los puestos de otros dos, reduciendo así a la mitad el tamaño de la misión de Rusia en la alianza, informa Sky News. Según el canal británico, la decisión se tomó en respuesta a las supuestas "actividades hostiles" del país "en los últimos años".
"Podemos confirmar que hemos reducido a diez el número de puestos que la Federación de Rusia puede acreditar ante la OTAN", declaró un funcionario de la Alianza Atlántica al medio. Además, señaló que se espera que los ocho diplomáticos abandonen Bruselas a finales de mes, mientras que los dos puestos suprimidos están actualmente vacantes.
"La política de la OTAN hacia Rusia sigue siendo coherente. Hemos reforzado nuestra disuasión y defensa en respuesta a las acciones agresivas de Rusia, mientras que al mismo tiempo seguimos abiertos a un diálogo significativo", tuiteó la periodista del medio, Deborah Haynes, citando a la alianza militar.
La OTAN también ha confirmado la noticia a la agencia rusa RIA Novosti.
Respuesta de Rusia
Por su parte, Moscú condenó la decisión y tachó las acusaciones de "infundadas". "Occidente continúa su curso de confrontación diplomática con Rusia. La retirada de la acreditación de ocho miembros del personal de la Misión Permanente de Rusia ante la OTAN reducirá aún más el nivel de compromiso", declaró Leonid Slutski, jefe del Comité de Relaciones Internaciones de la Duma Estatal del país euroasiático.
Subrayó que "todas las acusaciones de supuesta 'actividad maliciosa' carecen de fundamento y no se confirmarán" y añadió que no tiene "ninguna duda de que el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ofrecerá una respuesta adecuada, no necesariamente simétrica".