El Gobierno de EE.UU. ha ordenado en secreto a Google que proporcione datos sobre cualquier persona que busque nombres y apellidos, dirección y número de teléfono de víctimas de agresión sexual, informa la revista Forbes citando documentos judiciales.
¿Precedentes peligrosos?
Como parte de una investigación del 2019 sobre el abuso sexual de una menor de Wisconsin, las autoridades federales ordenaron a Google que proporcionara los datos de cualquier persona que hubiera buscado información sobre ella en un período de 16 días.
La compañía entregó lo solicitado a mediados del 2020, incluidas las cuentas de Google y las direcciones IP de los usuarios que realizaron las búsquedas. Se suponía que este caso permanecía en secreto. No obstante, salió a la luz porque el Departamento de Justicia lo reveló accidentalmente en septiembre del 2021. Después de eso se dieron a conocer otros casos con solicitudes de este tipo, incluso enviadas a compañías como Microsoft o Yahoo.
¿En qué consiste el procedimiento?
Las llamadas "garantías de palabras clave" permiten a las autoridades absorber los datos de usuario de Google y las direcciones IP de cualquiera persona que ingrese un término sospechoso en un motor de búsqueda. En muchos casos, las autoridades localizan una cuenta de Google específica sobre la que desean obtener pruebas de que está vinculada a un delito.
Sin embargo, las órdenes de búsqueda de los usuarios por palabras clave son efectivamente expediciones de pesca, con la esperanza de atrapar a posibles sospechosos cuyas identidades el gobierno desconoce. Esta práctica tiene ciertas similitudes con las órdenes de arresto por geovalla, cuando los investigadores le piden a Google que brinde información sobre cualquier persona que se encuentre dentro de la ubicación de la escena del crimen en un momento determinado.
"Al igual que con todas las solicitudes de las fuerzas del orden, tenemos un proceso riguroso que está diseñado para proteger la privacidad de nuestros usuarios y, al mismo tiempo, respaldar el importante trabajo de las fuerzas del orden", recalcó un portavoz de Google.
No obstante, de acuerdo a Jennifer Granick, experta estadounidense en ciberseguridad, las órdenes de búsqueda por palabras clave "inevitablemente afectarán a las personas inocentes, especialmente si los términos de las palabras clave no son únicos y el marco de tiempo no es preciso". Además, Granick lamentó que la Policía envíe estas solicitudes en secreto, lo que "aísla estas prácticas del debate público y la regulación".