'Amparado' por los misiles más grandes de su país, el líder norcoreano Kim Jong-un declaró en un discurso en la Exhibición de Desarrollo de Defensa que el enemigo de Corea del Norte no es "un determinado país", como Corea del Sur o Estados Unidos, y recalcó que Pionyang únicamente defiende sus derechos de autodefensa. "Nuestro enemigo es la guerra como tal", manifestó.
En su discurso, Kim Jong-un se refirió a las amenazas que el Gobierno norcoreano percibe en la hostilidad de EE.UU. y a la hipocresía de Corea del Sur. En este sentido, acusó a Seúl de "doble rasero" por seguir aumentando sus capacidades militares mientras habla de la "paz, cooperación y prosperidad".
Rodeado de una amplia variedad de armas, entre ellas, los misiles balísticos intercontinentales de fabricación nacional Hwasong-16, los más grandes de los que dispone Pionyang, el líder norcoreano afirmó que no tienen pensado desatar una guerra y que no están discutiendo sobre semejante desenlace "con nadie". Asimismo, resaltó que todos los arsenales bélicos se necesitan "para prevenir la guerra como tal y aumentar literalmente la disuasión de la guerra para proteger la soberanía nacional".
Además de los Hwasong-16, la exposición militar cuenta con un misil "hipersónico" recientemente desarrollado por Corea del Norte. El evento, que se celebró para conmemorar el 76.º aniversario de la fundación del Partido de los Trabajadores, también contó con un 'show' aéreo de aviación militar.
"Tenemos que ser fuertes para nuestros descendientes. Primero tenemos que ser frentes", concluyó Kim Jong-un, cuyo discurso completo fue recogido por la Agencia Telegráfica Central de Corea (KCNA, por sus siglas en inglés).