El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha ofrecido indemnizaciones voluntarias a la familia de los 10 civiles que fallecieron en el ataque con dron estadounidense en Kabul durante la retirada de los militares de Afganistán en agosto pasado.
El Pentágono esclareció que además de las compensaciones, está trabajando con el Departamento de Estado para apoyar a aquellos miembros de la familia que estén interesados en emigrar a EE.UU., informa Reuters.