Fiston Ngoy, el hombre acusado la semana pasada de violar a una mujer en un tren de cercanía a las afueras de Filadelfia (Pensilvania, EE.UU.), aseguró recientemente a la Policía que el encuentro sexual había sido consensuado, informa The Philadelphia Inquirer.
Ngoy, de 35 años, declaró que conocía a la víctima de antes y había entablado una conversación con ella en el tren, que terminó en contacto físico. Reiteró además que ella había iniciado el encuentro sexual y nunca se había resistido a sus avances.
Sin embargo, la víctima negó esa versión, asegurando que el hombre había ignorado sus súplicas para que se alejara y que nunca antes lo había visto ni le había dado permiso para tocarla. Entre tanto, la investigación y las imágenes de vigilancia del tren respaldan que se trató de una violación.
En una declaración juramentada, la involucrada afirmó que se había tomado unas cervezas después del trabajo y luego abordó un tren en dirección al noreste de Filadelfia, el 13 de octubre a las 21:15. Un minuto más tarde, Ngoy ingresó, se sentó junto a ella y comenzó a instigarla. Luego intentó tocarla y le agarró los pechos, según muestran los videos del caso. "Durante todo este tiempo, la víctima obviamente estaba luchando por mantenerlo alejado de ella", señala el reporte policial.
Casi 40 minutos después, a las 21:52, habría ocurrido la violación. Agentes de la Autoridad de Transporte del Sureste de Pensilvania (SEPTA, por sus siglas en inglés) capturaron a Ngoy cuando el convoy se detuvo en una parada en el municipio de Upper Darby.
Enfrenta cargos de violación, agresión sexual y otros delitos relacionados. Actualmente permanece bajo custodia con una fianza de 18.000 dólares y a la espera de una audiencia preliminar que se realizará el 25 de octubre.
Podría haberse salvado del ataque
De acuerdo a los informes, la mujer fue agredida sexualmente en presencia de otros pasajeros, quienes no se atrevieron a impedir el crimen. Fue un empleado de la SEPTA quien reportó lo sucedido a la línea de emergencias 911.
Pese a que no está claro cuántos otros pasajeros había en el vagón, el superintendente del Departamento de Policía de Upper Darby, Timothy Bernhardt, dijo que, si las otras personas hubieran intervenido, la mujer podría haberse salvado del ataque. "Alguien pudo haber hecho algo. [Eso] habla de dónde estamos como sociedad y quién permitiría que algo así sucediera. Así que es preocupante ", agregó.
Bernhardt subrayó que los ciudadanos que presenciaron el ataque y en lugar de intervenir grabaron la escena con sus teléfonos podrían ser acusados penalmente, pero eso dependerá de la decisión de las autoridades una vez concluya la investigación. El superintendente no aclaró qué cargos podrían afrontar y añadió que, a pesar de todo, es "muy difícil presentar cargos" contra esos sujetos en ese contexto, The New York Times.