La conmemoración del segundo aniversario del estallido social en Chile, que se realizó el lunes, dejó un saldo preliminar de dos muertos, 56 heridos y 450 detenidos en cientos de manifestaciones que se extendieron por todo el país.
Así lo informó Marcelo Araya, director de Orden y Seguridad de Carabineros, al dar a conocer el reporte que dejaron las protestas pacíficas protagonizadas por miles de personas que fueron opacadas por actos de violencia puntuales.
Según la información que proporcionó el cuerpo policial, un hombre falleció por disparos de arma durante un intento de robo en un local comercial, mientras que la segunda víctima mortal fue una mujer que falleció tras caer de una motocicleta. Ambos sucesos tuvieron lugar en la capital, Santiago.
"Esta jornada fue esencialmente compleja y de contrastes", afirmó el funcionario al informar que Carabineros desplegó un amplio operativo que incluyó a 20.000 efectivos y 2.500 recursos logísticos, principalmente vehículos y aeronaves.
Agregó que, hasta el primer corte realizado, a las cinco de la mañana (local), se trabajó en coordinación con los servicios de emergencia en todo el país.
Araya reiteró que el contraste se produjo entre la violencia de algunos grupos y las manifestaciones principalmente pacíficas que se realizaron a lo largo de todo el día y en las que los carabineros trabajaron de una forma que fue evaluada de manera positiva por múltiples actores políticos.
En total, dijo, hubo 232 manifestaciones, 109 barricadas, 35 saqueos, 12 atentados incendiarios, 49 hechos de desórdenes, 15 atentados contra la autoridad, 13 ataques a cuarteles policiales y 15 situaciones en que se produjeron daños. También señaló que los saqueos se produjeron principalmente en la Región Metropolitana de Santiago.
Las 450 personas detenidas fueron acusadas de saqueos, desórdenes, daños e instalación de barricadas. Y entre los 56 heridos hay 45 funcionarios de carabineros, dos de ellos en estado de gravedad y 11 más con pronóstico reservado.
Responsabilizan a la oposición
El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, responsabilizó de la violencia a la oposición, en particular a los candidatos presidenciales de la izquierda Gabriel Boric (Apruebo Dignidad), quien encabeza las encuestas rumbo a las elecciones del 21 de noviembre, y la expresidenta del Senado, Yasna Provoste (Nuevo Pacto Social).
"Más allá de los autores materiales de estos delitos, ¿quiénes son los responsables finales de esta violencia? Bueno, yo creo que son quienes instalaron en nuestro país una sensación de impunidad, que cometer delitos violentos no era condenable en Chile", acusó el funcionario al reiterar su rechazo a que las miles de personas que están detenidas desde las protestas de noviembre de 2019 sean beneficiadas con un indulto, como pide la oposición, que los considera como presos políticos.
"De una vez por todas póngale hechos a sus palabras, dejen de redactar tuits en la noche de la violencia y hagan lo que tienen que hacer y con los hechos condénenla y rechácenla. Terminemos con la sensación de impunidad, esa creo que es la señal para los ciudadanos, de que esta violencia no es aceptable en un país democrático", exigió.