Wilson Joseph, líder de una banda criminal de Haití conocida como 400 Mawozo, amenazó públicamente con asesinar a los 17 religiosos secuestrados —provenientes de EE.UU. y Canadá— si no recibe un millón de dólares por cada uno de ellos.
La advertencia extorsiva fue grabada el miércoles, y el video se difundió el jueves. En las imágenes se puede ver a Joseph, vestido con un traje y un sombrero azul, luciendo algunas joyas. Está en un funeral, mientras se conmemora la muerte de algunos de sus "soldados".
"Juro por el trueno que si no obtengo lo que estoy pidiendo, les daré una bala en la cabeza a estos estadounidenses", expresa el delincuente, en alusión a los secuestrados. Entre ellos, hay adultos religiosos menonitas que realizaban tareas comunitarias en el país centroamericano, cuatro niños y un bebé de ocho meses.
El ataque
Estas personas fueron secuestradas el último sábado por la mañana mientras viajaban en un autobús. Un grupo fuertemente armado habría colocado barricadas en la carretera por donde transitaba el automóvil, y los detuvieron. Además de los norteamericanos, el chofer haitiano también fue privado de su libertad de modo irregular.
El secuestro se produjo en el marco de una visita de los religiosos, pertenecientes a la Christian Aid Ministries, a un orfanato cerca de Puerto Príncipe, donde la pandilla tiene fuerte presencia.
La organización detalla que las víctimas provienen de Wisconsin, Ohio, Michigan, Tennessee, Pensilvania, Oregón (EE.UU.) y Ontario (Canadá). En su página web, piden desplegar cadenas de oraciones, incluso para los secuestradores, "para que experimenten el amor de Jesús y se vuelvan a él".
"Los voy a hacer llorar sangre"
En cuanto al líder de la pandilla, previamente ya había sido buscado por las fuerzas de seguridad por los delitos de asesinato, secuestro, robo de vehículos y secuestro de camiones de carga.
Igualmente, en su grabación, Joseph también les dejó un mensaje intimidatorio al primer ministro local, Ariel Henry, y al entonces jefe de la Policía nacional, Léon Charles: "Ustedes me hacen llorar. Lloro agua. Pero los voy a hacer llorar sangre".
Y agregó: "Matar a cinco de mis soldados no significa que vayan a destruir mi ejército". En las últimas horas, el jefe de la Policía fue reemplazado por Frantz Elbé.
Entre tanto, Haití afronta un difícil escenario social tras el asesinato del entonces presidente, Jovenel Moïse, el 7 de julio del 2021. Ahora, el país presenta escasez de combustible, motivando conflictos económicos y protestas callejeras.
De hecho, este jueves cientos de manifestantes bloquearon carreteras y quemaron neumáticos en Puerto Príncipe, para denunciar el faltante y pedir más seguridad.
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