En Londres se congregó este viernes el denominado 'Tribunal de Belmarsh', un proceso popular que aboga por la liberación del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, y denuncia a EE.UU. por crímenes de guerra.
Diversas figuras públicas, entre ellas políticos, activistas y periodistas, denunciaron que hay una persecución política contra Assange.
"Lo que vemos aquí es un asesinato. Pasa sin comentarios", dijo ante el tribunal Edward Snowden, excontratista de la CIA y de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA). "Dondequiera que miremos, desde Afganistán a la economía, desde la pandemia a la vigilancia omnipresente, lo obvio se ha vuelto incalificable", agregó.
Hablar de tales cosas pondría a cualquiera en la misma categoría que Assange, un "criminal político" acusado por "la transgresión de elegir el bando equivocado", agregó.
"Si queremos liberar al mundo, tenemos que liberar a Assange", concluyó Snowden, que fue el último orador en el proceso, que duró más de dos horas y media.
Otros denunciantes, como Annie Machon (exoficial del MI5) y Daniel Ellsberg (conocido por filtrar los "Papeles del Pentágono"), también se dirigieron al tribunal. Asimismo, entre los oradores destacados se encontraban cuatro diputados laboristas y el expresidente de Ecuador, Rafael Correa.
El acto fue organizado por la Internacional Progresista y presidido por Srecko Horvat, filósofo croata cofundador del movimiento político europeo DiEM25 junto con el exministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis, que también intervino en la sesión.
Si te ha gustado, ¡compártelo con tus amigos!