No está cerca. A 28 millones de años luz de la Tierra, los astrónomos habrían descubierto el primer planeta que gira en torno una estrella fuera de la Vía Láctea.
La existencia del objeto estelar, si se confirma, sugiere que podría haber muchos otros exoplanetas extragalácticos esperando ser descubiertos, informan los especialistas en un estudio que aparecerá en la revista Nature Astronomy.
Con ayuda del Observatorio de Rayos X Chandra de la NASA y el telescopio XMM-Newton de la Agencia Espacial Europea, los expertos habrían detectado ese planeta en la galaxia espiral Messier 51 (M51), también conocida como Whirlpool.
El potencial planeta podría ser parte del sistema estelar conocido como M51-ULS-1, que cuenta con un agujero negro o una estrella de neutrones y una estrella compañera con una masa aproximadamente 20 veces mayor que la del sol.
El método utilizado para detectarlo se basó en la teoría de tránsitos, que analiza las caídas de los rayos X de una estrella durante el paso de un objeto celeste frente a ella.
Los rayos X provienen de binarios brillantes, que generalmente consisten en una estrella masiva y los restos de una segunda que ha colapsado y devenido en estrella de neutrones o agujero negro. Cualquier material cercano a ella 'se sobrecalienta' a temperaturas tan altas que emite rayos X brillantes, que se destacan entre la multitud de otras estrellas.
Debido a que la región que produce rayos X brillantes puede ser más pequeña, un planeta que pase frente a ella podría bloquear temporalmente la mayoría o la totalidad de esos brillos, y así revelar la presencia del planeta.
En las mediciones de los autores del estudio, las emisiones de rayos X se redujeron a cero durante la observación del sistema M51-ULS-1, lo que, según los expertos, indicaría que el planeta tiene aproximadamente el mismo tamaño que Saturno y orbita una estrella de neutrones o un agujero negro a aproximadamente el doble de la distancia que Saturno gira alrededor del sol.
Los expertos han explicado que a pesar de ser este un descubrimiento tentador, se necesitan más datos para confirmar la existencia del planeta, algo que puede no confirmarse durante décadas, ya que los datos sugieren que el planeta tarda aproximadamente 70 años en cruzar frente a su socio binario.